Yo no quiero que me llores
cuando ya no esté contigo,
recuerda lo que te di,
la vida que compartimos.
Mientras tu sigas aquí
nada acabará conmigo,
me tendrás a cada paso
buscando en tu pecho abrigo.
Nuestra vida es un instante,
pero aquello que quisimos,
esos pequeños momentos,
es lo que la dan sentido.
En la noche de mi ausencia
recuerda que te he querido,
cierra los ojos al viento
y repasa lo vivido.
Si no fuera porque yo
de la vida soy cautivo,
ten la certeza, mi amor,
que ni el invierno, ni el frío,
ni el verano y el calor,
ninguna cosa ha nacido,
que te pudiera alejar
de estos brazos que son míos.
Yo me moriré, quizá,
pero contigo he vivido.
ESTÁS LEYENDO
Versos de otros tiempos
PoesíaEstos poemas nacieron durante mi estancia en Madrid de unos siete años, por motivos de trabajo, tratan de cosas que pasaron, de otras que pudieron pasar y de algunas que imaginé.