LXVII

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Morena de verdes ojos

que vas con cara de pena,

¿quién te hiciera sonreír

al arrullo de las velas?.

Cuantas más veces te miro

más hermosa te presentas,

yo quisiera ser el dueño

de esa rebelde melena,

susurrarte en el oído

palabras de amor sinceras,

calmar la sed en tus labios

mientras la vida me tenga.

Ni siquiera sé tu nombre,

sólo tengo tu presencia,

en tus ojos he leído

la soledad que te espera,

la misma a la que camino

cuando pase esta quimera.

Cualquier tarde de verano,

la que tú menos esperas,

te contaré de tirón

lo que mi silencio encierra,

los besos que yo te he dado

en noches de duermevela,

las palabras que dijiste

con tu boquita pequeña.


Versos de otros tiemposDonde viven las historias. Descúbrelo ahora