Mi vida pende de un hilo,
y sin embargo, lo siento,
esa fuerza que me arrastra
a convertirme en eterno.
Mujer, ¿sabes el camino
en la noche de los tiempos?,
vive en ti toda la luz
que me lleva a los comienzos.
¡Cuántas noches perseguí
los secretos de tu cuerpo,
hasta perder el sentido
por todos sus recovecos!.
Todo lo que yo te di
mil veces me lo ha devuelto
tu vientre fecundo, fértil,
y de ti todo lo espero.
Esas pequeñas personas
que tu cuidas con esmero,
serán testigos un día
de todos nuestros esfuerzos.
Ellos te llamarán madre,
y evocarán tus recuerdo,
cuando llegado el momento
partamos de ellos tan lejos.
Pero no tengamos prisa,
pues son aún tan pequeños.
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Versos de otros tiempos
PoetryEstos poemas nacieron durante mi estancia en Madrid de unos siete años, por motivos de trabajo, tratan de cosas que pasaron, de otras que pudieron pasar y de algunas que imaginé.