Vanos esfuerzos son todos
los que no llevan a ti,
de qué me vale alcanzar
el más remoto confín,
si me faltaran tus ojos
que me llevan a sentir
que estoy vivo de verdad,
¿cuántas batallas perdí?,
y siempre estaban tus brazos
para hacerme revivir.
La eternidad es tu cuerpo
que se proyecta sin fin,
eres promesa de vida
en medio de un tiempo gris,
tan solo cuando regreso
a tu regazo feliz,
siento que encontré mi sitio.
Triste gloria sin tu boca,
dame sólo tu carmín
en un beso sin final,
sé la flor de mi jardín,
la esperanza en el mañana,
la sombra de lo que fui,
sé lo que te venga en gana
pero solo junto a mí.
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Versos de otros tiempos
PoetryEstos poemas nacieron durante mi estancia en Madrid de unos siete años, por motivos de trabajo, tratan de cosas que pasaron, de otras que pudieron pasar y de algunas que imaginé.