Hay un tiempo y un lugar
que pervive en mi memoria,
viejos momentos robados
al olvido de mi historia.
Son los momentos de ti,
son nuestras pequeñas cosas,
las largas noches de fiesta,
el correr raudas las horas.
Íbamos sólo de amigos
sin cadenas y sin bodas,
estar contigo era así,
sencillo, sin luz ni sombras.
Hubiera vivido un siglo
así, de la misma forma,
hasta que un día llegó
la vida con una escoba,
te marchaste de mi vida
sin recados y sin notas,
entonces me sentí triste
sin entender mi zozobra,
hasta unos años después
cuando conocí a Mariola,
y aunque nunca se lo digo
mi mente te rememora,
sobre todo en esos días
que mi paz se desmorona.
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Versos de otros tiempos
PoesíaEstos poemas nacieron durante mi estancia en Madrid de unos siete años, por motivos de trabajo, tratan de cosas que pasaron, de otras que pudieron pasar y de algunas que imaginé.