Princesa de piel morena
en la noche de la salsa,
el ritmo de tus caderas
y la noche que nos traga.
"Baila, mi amorcito, baila",
tus dos labios susurraban,
y yo preso de un hechizo
que la mente me robaba.
Nuestros cuerpos sudorosos
bailaban ritmo de samba
y mis ojos delatores
entre son y son te hablaban.
Princesa de piel morena
quiero visitar tu cama,
susurrarte en un oído
el eco de mil palabras,
perseguirte entre las sombras
que de nosotros se escapan.
Yo te regalaré un reino,
en esta noche que marcha,
te daré mi corazón,
todo, en bandeja de plata,
pero al marcharse la noche,
al llegar la madrugada,
déjame fundirme en ti
y lograr la ansiada calma.

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Versos de otros tiempos
PoesíaEstos poemas nacieron durante mi estancia en Madrid de unos siete años, por motivos de trabajo, tratan de cosas que pasaron, de otras que pudieron pasar y de algunas que imaginé.