"¿Voy bien por aquí a Moncloa?",
me dijo en la estación,
rubia y media melena,
zapatitos de tacón.
"Yo voy hacia ese lugar",
la mentí con convicción,
dejándome llevar, por
la pasión del corazón.
No soltaba ni palabra
acurrucada en su visón,
el metro iba tan repleto
que de su cara cayó,
una gran piedra preciosa,
una gota de sudor.
La sequé con mi pañuelo
y su rostro se mudó,
se dibujó una sonrisa
y vi en sus ojos amor.
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Versos de otros tiempos
PoesíaEstos poemas nacieron durante mi estancia en Madrid de unos siete años, por motivos de trabajo, tratan de cosas que pasaron, de otras que pudieron pasar y de algunas que imaginé.