CLI

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Hoy paseé por un mundo

donde la gente callaba,

las personas se tocaban,

se lanzaban mil miradas,

pero todo era silencio,

ni una pequeña palabra,

unos leían un diario,

miraban por la ventana

otro puñado de gente,

algunos más escuchaban

música que los salía

de un aparato en la manga.

Dentro de la gran ciudad,

la vida se nos escapa,

sin un ruido, ni un quejido,

se nos presenta el mañana

como un presente perdido,

de lo raudo que se marcha.

Me enamoré de unos ojos

que ya perdieron su cara,

la vorágine de gente

sin piedad se la llevaba,

no hay tiempo para pensar

envuelto por sus entrañas,

sólo se puede tener

lo que agarras con tus zarpas.

Versos de otros tiemposDonde viven las historias. Descúbrelo ahora