Llevo una carga de siglos
sobre esta espalda cansada,
soy la voz de los que fueron
antes de que fuera nada.
Por mis venas corre, rauda,
la sangre que se derrama
por las tierras de Castilla
desde mi niñez lejana.
¡Mujer, ábreme la puerta!,
llevo sobre mis espaldas
una carga que tan solo
para ti está reservada.
En ti viven las legiones
de seres que me acompañan,
a través de tu persona
a la vida se atenazan.
No me mires con reparo,
no me digas que me vaya,
sólo tú tienes la llave
de la vida que se escapa.
En ti está la primavera,
la promesa de un mañana,
todo lo que da a la vida
dulces luces de esperanza,
en ti reside el olvido
de la pena más amarga.

ESTÁS LEYENDO
Versos de otros tiempos
PoetryEstos poemas nacieron durante mi estancia en Madrid de unos siete años, por motivos de trabajo, tratan de cosas que pasaron, de otras que pudieron pasar y de algunas que imaginé.