Keep Alive ~ [ Daryl Dixon y tú ]

87. No quiero morir

[Nota: En este capítulo lo que está en cursiva son tus pensamientos]

Llevaban unos buenos metros caminando y llevando a Maggie en una camilla por el bosque, Carl y tú se encargaban de ir matando a los caminantes que se les acercaran. Solo había silencio, nadie hacia comentario alguno de la situación. Todo se volvía tan terrible, tan de película de terror, que esperaban que en cualquier momento los atacaran. Así fue, unos malditos silbido se comenzaron a sentir y a retumbar en sus oídos. La sangre se heló, el estómago se apretó y sentiste que en cualquier momento ibas a caer de tanto que tu cuerpo temblaba. Tenías miedo, mucho miedo, como nunca antes.

- ¡Corran! – grita Rick, hacen caso a lo que dicen y tratan de escapar de los silbidos que cada vez se hacen más fuerte. Una gran luz los enceguece y los detiene –

Estamos muertos... es la hora.

- ¡Al fin llegan hasta su destino! – dice el tipo que les habló la primera vez que los detuvieron – Rick, ¿Les dijiste a todos tus amigos que los amabas? Espero que hayas aprovechado el día – todos miran asustados a la gente que los rodea, cerca de cincuenta personas o mucho más – entreguen todas sus armas.

- Ey, so-

- Cállate, Rick – los Salvadores se acercan a ustedes y comienzan a quitarles todo lo que traían encima. La lengua se seca y tu manos comienzan a sudar; es el fin para todos – arrodíllense. Bajen a la enferma, también debe ver los que les espera – bajan a Maggie, tú y Rick se encargan de llevarla hasta donde el tipo alto indica - ¡Arrodíllense! – todos obedecen –

Es el fin... llegó nuestro maldito fin. Por favor, para...

¿A quién acudías ahora? ¿Dios? No eras creyente, no lo suficiente ¿Mamá? ¿Papá? ¿Robert? ¿Susan? No te iban a oír. Diste una mirada a los demás, estaban igual de cagados en los pantalones que tú. Mierda, esto no podía ser así. Solo no podía.

Sentías los pasos andando por tu alrededor, los cuchicheos hacían estremecerte. Mierda que tenías miedo, como jamás lo habías sentido. No podía ocurrir algo malo nuevamente, no otra vez ¿Cuánto más tenías que vivir? ¿Es un castigo de Dios por no creer en él? Papá decía que Dios no era castigador, que mandaba pruebas para hacerte crecer y encontrarte con él... ¿Tanto desea que te vuelvas a su lado?

Caminantes, muerte de Rob, la granja invadida de caminantes, el gobernador, cuando cayó la prisión, Terminus, muerte de Susan y la caída de Alexandria... Todo eso pasaba por tu cabeza.

¿Y ahora esto?

Dale, T-Dog, Lori, Andrea, Hershel, Beth, Tyreese, George, Rose, Gael, Denisse...

¿Cuántas vidas más quiere? Estabas segura que podías seguir nombrando a gente que ha muerto de tu familia, de esta nueva familia que estabas formando.

Jofi...

Mierda... ¿Qué pasa si mueres ahora?

Tu mirada se desvía hacia un camión, el tipo alto que parecía mandar a los demás, comenzó a llamar a gente desde el interior. Sentiste que todo se detuvo cuando ves que Daryl, tú Dixon, baja ensangrentado y cae directamente al suelo. Tratas de levantarte, pero Aaron te detiene tomando de tu mano fuertemente. No lo haces finalmente, sabes que si te atreves a levantarte, vas a morir... o él.

No, no, no... no puede ser...

No podía morir él ahora. No ahora. Te mira con miedo, es la puta primera vez que lo ves con miedo en sus ojos y eso te hace quebrar desde lo más interno.

Estabas en la orilla, eras la última de la fila y él no dudó ningún segundo y fue hasta tu lado. No hace nada, no te mira ni habla. Solo se queda a tu lado, como siempre ha sido. Siempre ha estado ¿Antes habrías imaginado cuánto lo amarías? Claro que no, no lo imaginabas. De simple sexo a tener una real relación, después de tanto tiempo andando juntos. Cómo olvidar las veces que preparaban turnos en las torres de vigilancia en la prisión y solo era para encontrarse, conocerse y sentirse. Aunque también estaban los malos momentos, claro, las veces que él perdía el control y se volvía un idiota.