102

14.4K 2K 2.4K
                                    

Namjoon miró a Seokjin de reojo. Estaba acariciando la cabecita de Mellie, a quien sostenía entre sus brazos, mientras esperaban a Hoseok en el jardín. El ambiente estaba algo cargado y ninguno de los dos parecía estar entusiasmado por ir a pasar el día a un parque de atracciones.

—¡Ya estoy!— Hoseok apareció con mucha energía, pero en cuanto los vio, se le cambió la cara —¿Por qué vais así vestidos?

Seokjin seguía en pijama y Namjoon se había puesto un chándal con el que solía hacer ejercicio. Tampoco parecían haberse peinado, daba la impresión de que llevaban cinco minutos levantados.

—Vamos a un parque de atracciones a pasarlo en grande, no al monte a recoger chatarra— soltó indignado —Poneos algo decente, ni que tuvierais que pagar por la ropa.

—Pero Hobi, si no nos va a ver nadie...

—Os veo yo y me estáis causando ceguera cortical— Hoseok señaló hacia la puerta de la casa —Entrad ahora mismo y no salgáis hasta que os hayáis puesto algo que no me recuerde a los mendigos del siglo dieciséis.

Seokjin dejó a Mellie en el suelo y se alejó de ellos aguantándose la risa. Le causaba gracia lo dramático que se había puesto Hoseok, aunque gracias a él, se había disipado la tensión.

Namjoon se decantó por un pantalón vaquero desgastado y una camiseta ajustada de color verde. Seokjin, en cambio, optó por un pantalón gris y una camiseta azul de estilo henley. Ahora no desentonaban con Hoseok, que se había vestido con un pantalón con estampado de grafiti y una camiseta amarilla holgada.

—¿Veis? No era tan difícil vestir como dos personas— gruñó Hoseok al verlos desfilar a su lado —¿Estáis listos para pasarlo en grande?

—Ajá...

—Un cementerio con cuatro tumbas está más animado que vosotros dos. ¿Tengo que inyectaros un estimulante para que despertéis?

Namjoon frunció el ceño. La pregunta correcta sería, ¿por qué estaba él tan animado? El menor apenas había pegado ojo por culpa de una pesadilla en la que Seokjin y Hoseok desaparecían de su lado. Y aunque sabía que solo había sido un mal sueño, seguía bastante aturdido por la sensación que dejó en él.

—En fin, no seáis tímidos y acercaos. Os voy a mostrar el mejor parque de atracciones de la historia de la humanidad.

—Hobi, ¿recuerdas cómo tienes que llevarnos?

—Visualizar el lugar, desear estar allí y chasquear los dedos, ¿correcto?

Namjoon asintió. Con la práctica se podía hacer solo con la mente, pero Hoseok seguía siendo un novato y debía comenzar por lo más básico.

—¿Estáis preparados?

Seokjin apretó a Mellie contra su pecho y se sujetó del brazo izquierdo de Hoseok, mientras Namjoon lo hacía del derecho.

—Tres, dos, uno...

El sitio cambió, tal y como había previsto, no obstante, cuando se percató de a dónde los había enviado, se le paró el corazón del susto. 

Seokjin y Hoseok comenzaron a gritar mientras se precipitaban por el interior de un volcán. El calor se hacía insoportable, pero la histeria colectiva no les permitía procesarlo de la misma forma que a Namjoon, que era el único que había logrado mantener la compostura.

Gracias a la templanza del menor regresaron al jardín de su casa. A pesar de que ya no estaban cayendo hacia la lava, Seokjin y Hoseok seguían gritando a pulmón abierto. Mellie era la única que había dejado de ladrar, aunque todavía estaba algo conmocionada.

Retrouvailles | ⁴Donde viven las historias. Descúbrelo ahora