Desde que Taeju salía con Junggi, no podía dejar de pensar en sexo. Su mente le encontraba a todo un doble sentido, por muy banal que fuera, era capaz de ver algo lascivo en las situaciones más inocentes.
Claro que así era la adolescencia, los cambios hormonales eran los responsables del aumento del interés sexual, pero ese deseo lo había puesto ya en algún que otro aprieto.
La primera vez sucedió unos días después del cumpleaños de Sohee, al salir adormecido de su dormitorio. Iba a ir a la cocina a por un vaso de agua cuando su padre lo detuvo en el pasillo.
—¿Appa?— murmuró en voz baja —Buenos días...
—Buenos días— Taehyung lo agarró de los brazos y lo volvió a conducir hacia su habitación —Entra en tu cuarto antes de que te vea tu hermana.
Taeju no entendió el comentario, pero como estaba tan amodorrado, hizo lo que le dijo sin rechistar. Fue dentro de su dormitorio cuando comprendió que se había levantado con una erección. La vergüenza que sintió fue tan grande, que no volvió a salir de allí en todo el día.
Taehyung tuvo que ir a hablar con él varias veces y aunque le soltó la típica charla de no es culpa tuya, es algo natural, le sucede a todos los jóvenes de tu edad, lo que provocó su encierro voluntario, no fueron las palabras de su padre o la erección en sí, fue el hecho de que su hermana podría haberlo visto. Prefería la muerte a pasar por una humillación como esa.
La segunda vez que atravesó por un momento similar fue en medio de una comida. Junggi los había acompañado como en otras ocasiones y mientras disfrutaban del tteokbokki que había preparado Jungkook, Taeju no podía apartar la mirada del rostro de su novio.
Ese día, por alguna extraña razón, Junggi le pareció deslumbrante. Su belleza no era algo nuevo para él, pero su forma de mirar, de sonreír e incluso de hablar, lo tenían embobado. Cuando su chico se llevó un pastelito de arroz a la boca y la salsa roja manchó sus labios carnosos, su cuerpo reaccionó en público como no lo había hecho nunca.
El primer pensamiento que se le cruzó por la mente fue salir corriendo, sin embargo, se quedó sentado, petrificado por el miedo a ser descubierto. Taeju aguantó estoicamente, a pesar de la vergüenza siguió comiendo como si no sucediera nada. No quería que su familia pensara mal de él y mucho menos su novio. Aun sabiendo que tendría el apoyo de Taehyung, le daba pánico que su comportamiento les pudiera parecer repulsivo.
Por eso aprovechó el instante en el que sus padres se levantaron de la mesa para recoger los platos, y Sohee estaba hablando con Junggi sobre música clásica, para escaquearse y encerrarse en el cuarto de baño.
Aunque ese despropósito que deseó borrar de su mente sucedió en julio, agosto no pintaba muy diferente. Sus hormonas seguían desquiciadas. Afortunadamente, no se había vuelto a repetir una situación similar.
Por otra parte, su romance con Junggi seguía siendo maravilloso, aunque últimamente le preocupaba cierto aspecto de su relación. Taeju deseaba hacerlo feliz, en todos los ámbitos, y por eso, ansiaba ser un buen amante.
Pero, ¿cómo se era un buen amante? ¿Te lo decía tu pareja? ¿Lo notaba uno mismo? El muchacho le podría haber preguntado a sus padres, tenían una buena comunicación entre ellos y había confianza, pero los dos contaban con el mismo problema; eran demasiado cotillas. No podía arriesgarse a que descubrieran su relación con Junggi.
Sus tíos, por otro lado, también eran una opción favorable para pedir consejo, siempre habían estado a su lado y Jimin era su tío favorito. No obstante, cabía la posibilidad de que su novio se enterase y no quería que supiera que estaba buscando esa clase de información.
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Retrouvailles | ⁴
HorrorContinuación de EVANESCENTE. ▪️Género: Drama | Terror | Acción | Romance ▪️Inicio: 16/09/19 ▪️Final: 25/04/24 ▪️ Capítulos: 130 ▪️ + 2 especiales (Mangata & 130) ▪️Portada: ethereal-mxxn ▪️+18 | Lemon | Versátil ▪️Historia original | No permito...