- Sin novedades. No he vuelto a verle desde que me levantó la mano.
Melen sabe todo lo que ha pasado. Con detalles.
- Y no quiero volver a hacerlo.
Aseguro.
- Nunca.
M: ¿Sabes que eso es imposible, verdad?
Bufo. Si que lo sé, y cuando llegue el momento no tengo idea de como enfrentarle.
- No quiero hablar de eso.
Le pido.
M: Tarde o temprano tendrás que hacerlo.
Me recuerda.
M: Y sabes dónde encontrarme para que te limpie las lágrimas.
Aceptando mi pedido zanja el tema. El resto del tiempo lo pasamos contándonos más cosas, riéndonos y entre tonterías como lo hacemos siempre. Poco después toca ir al recinto. Tenemos que ensayar para esta noche.
Narra Mateo
Miro las redes. El concierto de Melendi hace semanas que colgó el cartel de sold out y la aparición de Malú sobre el escenario con él ha causado furor. Si la gente les adora por separado, juntos son una explosión, y por más que intente negarlo, me remueve algo adentro ver la complicidad con la que cantan, se tocan y se miran.
M: Se te va a gastar el móvil de mirarla tanto.
Ruedo los ojos.
+ No te rías, tonta.
M: Esta bien, pero vos cambiá esa cara de nabo o me lo dejas imposible.
Ruedo los ojos y aprovecho la compañía de Male para dejar de torturarme. Confío en ella. Sé que ahora está conmigo y que solo se lo está pasando bien arriba del escenario con su mejor amigo, pero joder, ¿Cómo evito los celos que me comen por dentro cuando están juntos?
M: Che, tienen la re química.
Se engancha conmigo a la pantalla.
M: ¿Sabés que les llaman Menlú?
La miro anonadado. Me quiere picar y lo está consiguiendo.
M: ¿Qué?
Se ríe a carcajadas.
M: Lo busqué en internet.
Se excusa inocente.
+ Malena, cierra la boca.
La amenazo haciendo que se ría con más ganas y farfullo mosqueado. Cuánto me gustaría estar con ella ahora mismo y hacerle el amor toda la noche, porque es mía. Solo mía.
M: ¿Al final tenés planes para el lunes?
+ No, pero Malú insiste en que hagamos algo.
M: Es que vos sos un aburrido, ¿Cómo no vas a querer celebrarte?
+ Pero si ni tengo suficientes amigos aquí para llenar el salón haciendo una fiesta.
En estos meses he recuperado el contacto con unos pocos, pero no los suficientes como para montar algo grande. Además hace años que ese tipo de celebraciones no va conmigo.
+ Iremos a cenar o algo así.
Me encojo de hombros. Es un plan repetido, pero no se me ocurre otra cosa.
M: Pero que embole. Te puedo asegurar que Melendi le ofrece mejores planes.
No pierde la oportunidad de seguir chinchándome, y yo como tonto caigo a trapo.
+ Pensaba invitarla a que se venga con Eva y conmigo mañana al Acuario y luego a merendar.
Le cuento. Así es como la enana y yo pasaremos mi cumpleaños. La idea ha sido suya. Parece ser que a todos les hace más ilusión el día que a mi, y mi sobrina no dejó de insistir en que la deje faltar a la escuela para que estemos juntos, hasta que he accedido a adelantar nuestro plan para el domingo.
+ Pero no estará de vuelta en Madrid.
M: Tampoco hablaba de una fiesta infantil en el acuario.
Carcajea.
M: A veces de verdad sos un boludo, Mateo.
Me contagio de su risa. Claro que cuando tenga a Malú sola para mi pienso celebrar por todo lo alto, desnudos en mi cama, pero esa no es la fiesta que pensaba contarle a Malena.
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Todos los secretos (Segunda parte)
RomanceUna historia en la que TODOS tienen algo que ocultar