Capítulo 239

87 16 5
                                    

Narra Mateo

Marco el número de Malú. Sé que me pidió que me comunicase con Verónica, pero mis dedos son incapaces de ver su nombre y no buscar cualquier tipo de contacto con ella.

E: ¡Mateo!

Me sorprendo cuando lo coge a la primera, pero luego aparece la voz de mi pequeña, Malú evita hablar conmigo.

+ Hola princesa.

E: Hola.

+ ¿Cómo estas?

E: Bien.

Me cuenta. Sé que allí lo estará, llevo doce horas respirando tranquilo porque está con ellas.

E: Malú está haciendo su maleta.

Me cuenta.

E: Y me deja acompañarla y saltar en su cama mientras lo hace.

+ No la agobies, ¿vale?

Pido. Ya demasiado hacen por nosotros.

E: Que no.

Asegura.

+ ¿Has dormido bien?

E: Más o menos.

+ ¿Tuviste pesadillas?

Adivino. Una de las cosas que tengo pendientes es buscar un psicólogo que me guíe en cómo hacer que Eva supere estos días tan horribles sin traumas.

E: Sí.

Confirma.

E: Pero Malú me ha dejado tomar leche por la noche.

Se ríe traviesa.

E: Y le he puesto Cola Cao.

+ Esos dientes, Eva.

Finjo regañarla. En realidad lo único que hago es agradecer el corazón enorme que tiene la mujer que le ha devuelto la calma. Si antes estaba pillado por ella hasta las trancas, ahora ya ni sé.

E: Y luego me ha cantado una canción y me ha hecho mimos para que me duerma con ella.

Me cuenta.

E: En su cama.

Su cama. ¿Cuantos arrebatos de amor nos hemos demostrado en ella?

+ Le habrás dado las gracias, ¿no, enana?

E: Malú, gracias por dejarme dormir contigo.

Lo hace ahora, y aunque no puedo verla, intuyo una sonrisa.

- ¿Ah que hemos dormido a gusto juntas?

E: Sí.

Mi niña ha recuperado la alegría en su voz. Jamás dejare de estar agradecido.

+ ¿Me dejas hablar con ella?

E: Quiere hablar contigo.

Parece acercarle demasiado el móvil, porque la escucho resoplar.

- Mateo...

+ Gracias.

- No las des.

+ Malú...

Suplico sin decir nada más. Nos oímos respirar, mudos.

+ ¿Puedo ir a verla antes de que partan a Valencia?

Decido romperlo sin incomodarla más. Estoy seguro que no va a negármelo, y necesito verla.

- Sí, pero no tardes, Vero planea salir dentro de una hora.

+ En quince minutos estoy allí.

- Vale.

Narra Malú

- Vero.

La llamo. Está abajo, dándole algo de comer a Carla.

- Me despido de vosotras ahora, ¿vale?

Arquea una ceja.

- Mateo vendrá a saludar a Eva.

Respondo a sus dudas.

- Voy a sacar a las perras...

Todos los secretos (Segunda parte)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora