Jun se cambió a las ropas que le habían llevado. Eran un cómodo y suave conjunto, el cual claramente había sido escogido por Ambrose. Era totalmente el estilo del Omega y debió admitir que le quedaba bien.
La puerta de la habitación se abrió y Ambrose entró al lugar, acompañado de Juliette.
Su mamá se veía preocupada pero feliz de verlo, y Jun le sonrió a ambos.
"¿Estás listo para irnos?" Preguntó el Omega sarcásticamente con una pícara sonrisa, notando su inquietud.
"No puedo esperar." Dijo al reírse y luego miró a su mamá. "¿Iras con nosotros?"
Juliette asintió. "Me quedaré por un rato. Si te parece bien."
Asintió genuinamente, ya que le gustó escucharlo. Además, quería estar un momento a solas con su mamá, ya que tenía tantas preguntas.
Los siguió a ambos fuera de la habitación. Las miradas curiosas de los enfermeros y doctores se dirigían hacia ellos, lo cual lo hizo sentir un tanto incómodo.
"¿Por qué nos miran así?" Murmuró. Su mamá y Ambrose siguieron su mirada y observaron a su alrededor.
"Ah—bueno, solo digamos que Brendan ha sido un poco demandante durante tu estadía." Respondió el papá de Brendan, viéndose apenado.
"Incluso salió un artículo acerca de ello." Agregó Juliette.
"¿Qué?" Preguntó exaltado, no pudo contener su voz. "¿Qué artículo?"
Su mamá lo miró nerviosamente.
"Alguien te tomó una fotografía y contactó a los paparazzi, les dijeron que Brendan se encontraba aquí acompañando a un Omega embarazado de su hijo." Ambrose se rio sin gracia. "Tres empleados y el director del hospital fueron despedidos debido al escándalo." Agregó sádicamente.
"Espera... entonces, ¿todos en la compañía saben de mi embarazo?" No entendía por qué este hecho lo hacía sentir un tanto nervioso.
"Sí, pero Brendan se encargó de censurar tu nombre y la fotografía no mostraba claramente tu rostro, así que no te preocupes." Ambrose se veía pensativo. "... No necesitas toda esa atención en este momento. Debes estar tranquilo," Continuó en un tono más suave.
Su mamá se mantuvo callada, pero era claro que estaba de acuerdo. La verdad era que la actitud de todos lo tenía un tanto molesto, lo trataban como si estuviera a punto de romperse en cualquier momento.
Llegaron al parqueo, donde los esperaba Kevin con una suave sonrisa en su rostro, la cual Jun le devolvió. No lo había visto desde el incidente y la verdad era que le agradaba verlo.
"Es un placer verlo bien," Dijo el Alfa y abrió la puerta del auto.
Jun se rio. "Lo mismo digo."
Su madre y Ambrose entraron después de él, luego de intercambiar saludos con el Alfa.
El camino fue breve, o así le pareció, ya que se la pasó la mayor parte del tiempo durmiendo. Le pasaba incluso en sus mejores días, se quedaba dormido todo el tiempo y ya todos a su alrededor se habían acostumbrado.
Al abrir los ojos, se encontró con la cálida mirada de Juliette—mientras que Ambrose estaba fuera, lanzándole órdenes que no entendía a los empleados—muchos de ellos eran rusos y otros italianos.
"Ya llegamos." Expresó su mamá con una sonrisa. "Supongo que reconoces el lugar." Continuó con una incómoda sonrisa.
Jun se sonrojó, y desvío su mirada al condominio que ya reconocía. Estuvo varias veces allí, pero ver el lugar después de tanto tiempo le generó un extraño sentimiento.
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Laureles y Peonías
RomantizmDespués de prácticamente ser ignorado por su familia por ser Beta, Junne se muda a otra ciudad para comenzar una nueva vida lejos de ellos. Pero al tratar de vivir tranquilamente, llama la atención de un Alfa dominante que está más que dispuesto en...