Lauren trata de seguir con su vida a pesar de haber perdido al amor de su vida.
Por otro lado Camila comienza una nueva etapa en su vida al salir del hospital...
¿Que sucede cuando sus caminos se encuentren?
...
La habitación de los mellizos estaba terminada, estaba hermosa decorada y todo bien acomodado.
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Desperté temprano hoy era sábado, desayuné junto a Boby que se había subido al sofá para hacerme compañía.
Termine de limpiar la casa, los niños y su mamá Lolo aun dormían y Boby estaba jugando con su pelota.
Me cambie y me puse a hacer mi rutina de yoga, luego de media hora Boby se acerco a mi con su correa.
C: Que pasa muchacho? - pregunte el me ladro, movía su cola y me mostraba la correa - Esta bien - dije tome correa y se la puse.
C: Pero será una vuelta corta si? - dije el movía su cola feliz, le abrí la puerta, era un día hermoso el sol brillaba y no había casi nubes.
Camine con Boby que se detenía en cada árbol a orinar, vi a Sara por la ventana de su casa esta me sonrió y la salude con la mano.
Seguí mi camino, en la esquina me encontré con Natasha que al parecer ir a salir a correr - Hey - la salude pero esta me ignoro y siguió su camino.
Quizás sean cosas mías pero podía notar la tensión entre ambas, en el trabajo apenas si me dirigía la palabra sin embargo no me importaba.
Boby se detuvo un par de veces para hacer sus necesidades las cuales tuve que recoger gracias a dios llevaba una bolsa.
C: Vamos muchacho - lo llame ya que se había quedado oliendo un árbol - Boby vamos - tire de su correa hasta que me siguió.
Pronto regresamos a casa, Boby fue a tomar agua, así que fui a nuestra habitación, donde Lolo casi roncaba, Eloise dormía en su pecho y los mellizos dormían como angelitos.
Fui a darme una ducha rápida, al salir me encontré de frente con una adormilada Lauren, con su cabello revuelto, me mordí el labio inferior viéndola de arriba hacia abajo.
Traía una camiseta era algo transparente y podían notarse sus pezones erectos, era corta así que podía ver un poco de su abdomen, al bajar la mirada se podía notar el gran bulto que se creaba en su entrepierna al parecer Laurenzo había despertado.
Lauren me sonrió - Buenos días Señora Cabello - dije dándole una sonrisa seductora pasando lentamente la lengua por mi labio mirando su entrepierna lo cual notó - Si son muy buenos días Señora Jauregui - dijo acercándose más a mi, rodeando mi cintura con sus brazos.
Yo solo llevaba una bata blanca y nada debajo ya que acaba de salir de la ducha y mi cabello estaba húmedo.
Me acorralo con el marco de la puerta, quiso besarme pero le corrí la cara haciendo que besara mi mejilla - Camz - susurró frustrada, yo solo quería jugar - Ahora no, lo siento Lolo - dije ella gruñó - Esta bien - dijo y me soltó.
