Mentía

1.3K 103 11
                                    

Ranma ½ no me pertenece.

Mas en momentos de desasosiego quisiera ser como Rumiko y portarme mal con los fans.

.

Fantasy Fiction Estudios presenta

.

El año de la felicidad

.

Mentía

.

Ukyo Kounji revolvió con delicadeza el té y dejó la cucharilla en el plato. Aburrida, no prestaba atención a la conversación de sus amigas, aunque sí sonreía o reía en los momentos indicados para aparentar que le interesaba lo que hablaban.

—Y lo vi con una chica del brazo —comentó Yuka con ánimo de chismorrear.

—Era lógico que Ranma Saotome no estaría demasiado tiempo soltero, después de todo es muy atractivo —dijo Sayuri.

—Irresistiblemente atractivo —acotó Sakura con una risita, pero inmediatamente Yuka le dio un codazo.

Ukyo por fin les prestó atención, miró a cada una, y cada una de sus amigas la miró, como esperando que ella, ya que era la interesada, diera el visto bueno para seguir la conversación.

—Atractivo, pero un idiota —dijo Ukyo.

Las demás rieron y pudieron hablar libremente.

—Por supuesto, querida, tan idiota que te perdió. Hiciste bien en dejarlo si no aclaró sus intenciones desde el principio —dijo Yuka.

—Creí que estaban prometidos, Ukyo —aventuró Sakura.

Ukyo disimuló su tu turbación tomando un sorbo de té.

—Claro que no —rio con poca alegría—. ¿Comprometida yo con un don nadie como él? En realidad solo me divertía, después de todo es muy guapo y ambos somos jóvenes.

—Claro, claro.

—Lo vieron en la universidad de Tokyo, con una chica cualquiera del brazo. Es bonita, y algo popular entre los chicos, pero nada más. Una tal... —Sayuri lo pensó poniendo un dedo sobre el labio— Akane, creo. No recuerdo su apellido; por supuesto es uno común y corriente.

—Sin duda.

—Los de su clase se juntan entre ellos —dijo Yuka—. Nunca entendí, querida Ukyo, cómo es que tú estabas con un chico como él, después de todo no era, ni será, de tu nivel. Para divertirse un rato está bien, pero más de tres citas es demasiado, francamente.

—Pues... tenía buenos músculos —mintió Ukyo—. El tiempo pasó y ni me di cuenta.

Sakura se aclaró la garganta y se acercó un poco más a Ukyo.

—Y... ¿pudiste conocerlo más íntimamente? —quiso saber, haciendo un gesto con las cejas.

Las otras rieron sonrojadas y Ukyo casi se muere de vergüenza.

—¡No! Claro que no... Yo... nunca hubiera llegado a tanto.

—Con alguien como él, claro que no, es obvio, Sakura. Además, tu reputación se arruinaría para siempre —intervino Yuka.

—Así es. Tengo que pensar en mi futuro —dijo Ukyo y se concentró en su taza de té.

La conversación derivó por fin a otros temas y una hora después se despidió de sus amigas. Se metió en su auto particular y el chofer la llevó hasta la villa de su padre que quedaba en uno de los mejores barrios de la ciudad. Un impecable mayordomo le abrió la puerta y ella casi le tiró encima todas las bolsas de sus compras. Mientras subía la escalera pidió un té helado.

El año de la felicidad parte 1 (capítulos 1 al 200)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora