El año de la felicidad parte 1 (capítulos 1 al 200)

Escape

Ranma ½ no me pertenece.

Mas en momentos de desasosiego quisiera ser como Rumiko y portarme mal con los fans.

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Fantasy Fiction Estudios presenta

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El año de la felicidad

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Escape

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El tren corría rápidamente por la línea Joetsu del tren rápido. En el interior de uno de los vagones había dos chicas sentadas una frente a la otra junto a la ventana. La de cabello corto, con las manos en el regazo, miraba los campos de arrozales que se divisaban a los lados de la vía. Movía los pies de vez en cuando, como si los tuviera fríos y se los quisiera calentar. Las puntas de su cabello negro con reflejos azules aún estaban húmedas.

Se pasó un mechón por detrás de la oreja y miró a su compañera. La otra chica, una pelirroja que tenía el cabello trenzado, vestida extrañamente con ropa que parecía china, tenía el codo apoyado en la saliente de la ventanilla y el mentón descansando en su mano con cara de aburrimiento, mirando por la ventana el cielo gris de la tarde.

—Quiero agua caliente —murmuró suspirando—. ¿Justo hoy tenía que hacer este maldito clima?

—En cuanto lleguemos conseguiremos un poco, Ranma —respondió la chica de cabello corto.

Fue entonces cuando la pelirroja giró los ojos hacia ella y se miraron durante un momento, hasta que la otra apartó los ojos, sonrojada.

—¿Crees... qué estuvo bien lo que hicimos? —preguntó después Akane, preocupada.

—Desde el principio debimos hacerlo —respondió la pelirroja—, solo lo que nosotros queríamos, y no lo que ellos decían.

—Y les dejamos una nota, además —agregó Akane como para sentirse mejor.

—Fue demasiado, no lo merecían —refunfuñó Ranma.

El tren siguió avanzando, ya había dejado de llover.

—Entonces... ¿a dónde vamos? —quiso saber Akane con curiosidad.

—Eso es una sorpresa —los ojos de Ranma brillaron traviesos, haciendo sonrojar a Akane nuevamente.

La tarde ya caía cuando entre el cielo gris comenzaron a abrirse un par de nubes, mostrando el tono anaranjado del ocaso, que dio de lleno en la ventanilla reflejándose en las gotitas de agua sobre el vidrio, y cayendo sobre Akane.

—¿Ranma?

—¿Mm? —suspiró de nuevo, aburrido, queriendo llegar de una vez. Sus pies también empezaban a enfriarse.

—Gracias —replicó Akane sonriéndole.

Aquella palabra inesperada hizo que la chica pelirroja la mirara sorprendida. Akane sonrió, con la luz rojiza del atardecer dando en su cabello y sacándole luces doradas a sus ojos. Entonces, Ranma tembló sintiendo que el corazón casi se le detenía al ver algo tan bello. No tuvo palabras para responder, solo asintió, con los labios entreabiertos, provocando otra sonrisa en Akane.

Y así se quedaron las dos, mirándose mientras el tren avanzaba.

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FIN

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Nota de autora: Me dieron ganas de darle una especie de continuación al capítulo de ayer. La línea Joetsu del tren bala es una que llega casi hasta Niigata, en el norte de Japón. Espero que les haya gustado.

Gracias a todos por leer. No olviden visitarme en facebook en Fantasy Fiction Estudios.

Nos vemos mañana.

Romina