El año de la felicidad parte 1 (capítulos 1 al 200)

La promesa

Ranma ½ no me pertenece.

Mas en momentos de desasosiego quisiera ser como Rumiko y portarme mal con los fans.

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Fantasy Fiction Estudios presenta

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El año de la felicidad

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La promesa

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Fue Ranma el que abrió la puerta del dojo después del segundo llamado, y al abrir casi lo golpea en la cabeza el nudoso bastón de la anciana Cologne. La vieja mujer lo observó durante un momento y Ranma también se la quedó viendo, sin atinar a hacer nada.

—¿Cologne?

—Claro que soy yo, muchacho —dijo la mujer—. ¿Me extrañabas? —sonrió con picardía.

—Para nada —replicó Ranma sinceramente.

La vieja hizo una mueca de desagrado.

—Bien, ¿no me vas a invitar a pasar? Tú y yo tenemos cosas muy importantes de las que hablar.

—... ¿Usted y yo? —Ranma se rascó la cabeza pensativo—. ¿De qué tendríamos que hablar?

La anciana soltó una risotada.

­—¿Acaso ya olvidaste la promesa que me hiciste hace años? —los ojos de Cologne relampaguearon con un extraño brillo.

—¿L-La... promesa? —Ranma pasó saliva.

—Es hora de cumplirla —sentenció Cologne con seriedad.

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Sentada en el piso con las piernas dobladas, Cologne saboreó su taza de té. Akane, que estaba sentada frente a ella, observó con beneplácito cómo la disfrutaba y sonrió.

—Veo que has progresado un poco, muchacha. Antes se te quemaba hasta el agua ­—bromeó Cologne—. Al menos el té que preparas es delicioso.

—Gracias —Akane inclinó la cabeza con regocijo, después miró a la anciana—. También hice unos dulces para acompañar el té.

Cologne sonrió, rechazando el plato con un gesto de la mano.

—Es de sabios saber cuándo decir «no». Creo que no me arriesgaré, querida —dijo.

Antes de que Akane pudiera decir nada más, Cologne continuó.

—Akane, por las gotas de sudor en la frente de tu esposo, supongo que no te ha contado nada, y debes extrañarte por mi presencia.