El año de la felicidad parte 1 (capítulos 1 al 200)

Llamada

Ranma ½ no me pertenece.

Mas en momentos de desasosiego quisiera ser como Rumiko y portarme mal con los fans.

.

.

.

Fantasy Fiction Estudios presenta

.

.

.

El año de la felicidad

.

.

.

..

...

....

Llamada

....

...

..

—Se confirma la información que les hemos entregado en los últimos minutos: serían únicamente tres los sobrevivientes de la Estación Espacial Internacional que estaban a bordo del transbordador que amarizó frente a la bahía de Ishinimaki. Los héroes rescatados se encuentran ahora en custodia de la JASDF, en la base aérea de Matsushima, en la prefectura de Miyagi. Según nos indican fuentes confiables de la JAXA, los otros dos astronautas que no volvieron habrían tomado la drástica decisión de quedarse en la estación espacial hasta el último momento, para asegurar que su ruta de caída no pusiera en peligro...

—Solo tres volvieron —Nodoka habló por sobre las palabras del presentador de televisión, y tembló tras decirlo—. ¡Solo tres!

—Hay que confiar —dijo de pronto Genma, con los cristales de los anteojos brillantes de angustia—. Ranma podría estar entre ellos.

—Qué terrible debe ser para las familias de los otros dos —comentó Kasumi con pena, presionando la mano sobre su pecho—. Han sido tan valientes.

Akane estaba de pie, mirando la televisión como si su cuerpo fuera una figura de piedra.

—Tres... —repitió—. Ranma no está entre ellos.

—Akane, no digas eso, todavía no sabemos nada —dijo Kasumi, luego intercambió una mirada con su hermana Nabiki, llena de preocupación.

—¿No lo escucharon? —preguntó Akane, sus labios temblaban—. Conocen a Ranma, ¡todos lo conocen! Él jamás hubiera permitido que... No...

—Mi hijo Ranma es el hombre más valiente que existe —dijo Nodoka, con los ojos llorosos—, él no se hubiera ido dejando a sus colegas atrás.

—¿Usted también, tía Nodoka? —Nabiki resopló—. Como Kasumi dijo, todavía no sabemos nada. No es momento de entrar en pánico.

—Ese idiota... hubiera hecho... lo correcto... —murmuró Akane con la voz entrecortada, llevándose los dedos a los labios. Luego lanzó un quejido con la voz muy aguda, al borde de quebrársele de nuevo—. ¡Ese tonto!

—Akane, no... —insistió Kasumi, rodeándola con un brazo—. Ranma jamás te dejaría sola, ni a ti ni a Ranko.

—Pero... Kasumi... él...