El año de la felicidad parte 1 (capítulos 1 al 200)

Ángel (segunda parte)

Ranma ½ no me pertenece.

Mas en momentos de desasosiego quisiera ser como Rumiko y portarme mal con los fans.

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Fantasy Fiction Estudios presenta

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El año de la felicidad

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Ángel

(segunda parte)

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Basado en un fic/idea original de Noham Theonaus

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Una semana después, Akane estaba nuevamente acurrucada en la sala viendo una película, haciendo tiempo para la llegada de Ranma. Esta vez, muy misteriosamente, Kasumi le había encargado ir a hacer unas compras muy importantes y que no podían esperar al día siguiente. Pero había pasado mucho rato desde eso, y a esa hora seguro que ya todas las tiendas estaban cerradas. ¿Por qué Ranma no volvía aún?

—Akane, tienes que irte a dormir —le dijo con suavidad y dulzura Kasumi—. Tienes clases mañana.

Akane la miró, intentando descifrar algo en su rostro, pero no vio nada anormal. Desde aquel día en que creyó ver a Ranma entrando en su habitación a hurtadillas Akane se sentía un poco paranoica, todo lo encontraba sospechoso o extraño. De pronto los veía juntos en cualquier parte de la casa, cuchicheando, o dándose miradas extrañas durante la cena, o bien Kasumi tenía extraños encargos a toda hora, pero casi siempre en la noche. ¿Lo estaría imaginando todo? Tal vez solo conversaban, tal vez de verdad Kasumi tenía alguna compra urgente y no quería salir a esa hora y prefería enviar a Ranma que podía cuidarse muy bien solo.

—Prefiero esperar a Ranma —respondió Akane.

—Pero...

¿Kasumi parecía nerviosa o era su imaginación?

—No te preocupes, Akane, yo esperaré a Ranma porque necesito lo que fue a comprarme. Luego le daré la cena y nos iremos a dormir —le dijo Kasumi sonriendo como siempre.

«Nos iremos a dormir». Aquella frase, que mostraba tanta intimidad entre ellos, le taladró el cerebro a Akane.

—No, lo esperaré —dijo con terquedad y algo bruscamente.

Kasumi no dijo nada y se sentó a su lado. Al momento, Akane se arrepintió de haber sido tan dura, seguro que no era nada importante, seguro que no pasaba nada, seguro que Ranma estaba bien y solo volvería con las compras para Kasumi. Admitió que en realidad no era que sospechara de algo malo entre Ranma y su hermana, lo que en realidad le molestaba era que Ranma pasara tanto tiempo, y tuviera tanta cercanía y familiaridad, con alguien que no fuera ella, aunque esa persona fuera la dulce Kasumi.