La rosa negra

Capítulo 7

Malala Lorenzo.
Sábado 8 de Marzo, 8.45
°
Bajo suspirando frotando mis ojos, veo a mi madre viendo la televisión a la vez que busca algo en su portátil.
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-Un día lo quemas de tanto usarlo. -advierto riendo.
-Buenos días cariño. -dice dulce.
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Beso su cabeza y veo como esta buscando información sobre ese cadáver.
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-Mamá, porfavor. -cierro la pantalla.
-Hija, necesito saber de quien es ese cuerpo. -insiste.
-Sí es de mi padre nos enteraremos de una manera y otra, mamá, joder, tienes que seguir con tu vida. -digo realmente seria.
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Suspira, me llevo el portátil a la cocina pues voy a hacerme el desayuno y quiero que deje este aparato que tanto daño le está haciendo.
El teléfono de mi msdre suena y ella corre a mi al ver que viene de la policía.
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-¿Puedo cogerlo yo? -pregunto firme.
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Asiente dandome el móvil y pulso la zona verde para cogerlo.
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-Buenos días, buscamos a la señora Lorenzo. -dice serio.
-Es mi madre, tengo dieciocho, puede comunicarmelo a mi sin problema. -respondo firme.
-Necesitamos comunicarle a su madre que posiblemente el cuerpo que encontraron sea de su esposo, estamos aún con falta de pruebas pero debe contratar un abogado por si esto va a juicio. -explica.
-Yo se lo diré y eso haremos señor ¿cuándo debemos ir a comisaria? -pregunto.
-Él lunes a la mañana, cuanto antes mejor. -propone.
-Gracias, muy amable. -digo y cuelga.
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Mi madre me mira con sus ojos cristalinos y muevo la cabeza lentamente.
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-Hay posibilidades que sea papá, no cantes victoria porque están faltos de pruebas pero debemos buscar un buen abogado que sepa explicarnos más del tema y nos defienda en un juicio. -explico.
-Dejame el portátil para poder buscarlo, porfavor. -dice con un hilo de voz.
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La abrazo haciendo que rompa a llorar, cierro los ojos evitando sacar todas las lágrimas que dentro de mi se encerraron hace tres años, realmente perdí a padre y mi madre el mismo día y ahí comenzó una nueva vida.
Me doy una ducha preparándome para ir a la autoescuela y, al fin, acabar hoy con mi periodo ahí dentro y examinarme del practico.
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-Voy al examen. -anuncio antes de marcharme.
-Muchísima suerte cielo. -dice desde el sofá.
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Salgo de casa caminando hacia el autobús viendo a Valeria sentada en un banco próximo a la parada, me aproximo a ella y esta me sonrie.
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-¿Qué tal anoche? -pregunto.
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Ella muerde su labio y rio.
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-Me alegro que fuera bien. -digo riendo.
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Veo el autobús acercarse a la parada y, tras despedirme, voy rápida a cogerlo ¿realmente follaron?