La rosa negra

Capítulo 104

Jesus Oviedo.
Viernes 4 de Noviembre. 04.30
°
Puedo notar el viento azotar mi rostro provocando que mi cuerpo entero se erice, siento unnas cuerdas apretar kis brazos contra la pared y, cuando quiero darme cuenta, estoy atado a un muro totalmente inmovilizado de pies y manos.
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-¿Quién hay ahí? -pregunto frio.
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Veo una de las lonjas con una niña agarra en brazos.
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-¡Papi! -grita.
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Miro la escena, Malala esta ahocarda justo al lado de la moja y puedo ver a Elisabeth moverse a rastras hacia a mí.
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-¡Nadie tiene la culpa! No hagas nada hijo, él no quería. -dice llorando mi tata.
-¡Coje a Rosa! -grito.
-¡No desates el odio! -suplica llorando.
-Mi mujer. -grito en un sollozo.
-Todo lo malo vendrá si atacas a ese hombre, es bueno hijo, te juro que es bueno. -dice llorando.
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La monja le proporciona un disparo limpio en el pecho haciendo que caiga rendida y mi bebé cae desplomado al suelo una vez que esa señora repite el gesto en mi pecho.
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-¡Rosa! -grito despertando.
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Malala, exaltada, se reincorpora rápidamente y la miro con los ojos llenos de lágrimas.
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-Tú, Rosa ¿cómo estáis? -pregunto.
-Ey nene, estamos de maravilla. -dice confundida.
-No, estabais muertas y yo... -lloro.
-Tranquilo cariño. -suplica.
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Ella rápidamente me trae un vaso de agua, me calmo lentamente y ella besa mis labios.
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-Estamos muy bien... Mira. -dice cuando da una patadita.
-Mi niña. -toco la barriga.
-Está enfadada con papi porque la ha despertado. -bromea.
-Mi bebé pobrecita. -hago pucheros.
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Rie tierna y suspiro.
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-Algo fuerte va a venir, lo sé. -digo serio con mis majos en su barriga.
-Serio como qué. -pregunta.
-Nose joder, mi tata está involucrada, habla de un hombre muy bueno... Joder nose, estaba también una de mis monjas... Estoy mal Malala, sé que estoy mal. -susurro.
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Me mira realmente preocupada y suspira.
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-Calmate Jesús, sabremos llevar lo que venga, sea de la manera que sea. -asegura.
-Mañana viene un día movido. -susurro.
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Asiente y encoje sus hombros.
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-Ven nene, acuéstate. -susurra.
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Sonrio y me tumbo suspirando a la vez que vuelvo a poner mis manos en su barriga.
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-Quiero verla ya. -suspiro.
-Va a ser la bebé más bonita del mundo. -asegura.
-La vampira más hermosa. -rio.