La venganza viste de mujer

Epílogo Alternativo 2

Diez años después...

Era un frío día de enero en el palacio de justicia cuando Alivier Reinosa juró como el presidente de Venezuela número treinta y dos. Su hija Mayra con diecisiete años recién cumplidos, miraba orgullosa a Alivier mientras éste pronunciaba el juramento de rigor y el país se regocijaba por ellos dos. Eran lo mejor de Venezuela: decentes, honestos y buenos, y pertenecían a la Presidencia.

Las elecciones presidenciales se celebraban en Venezuela cada cinco años y hace precisamente cinco años atrás, Alivier Reinosa había intentado por primera vez ganar la presidencia, pero desafortunadamente las había perdido porque el fantasma de su pasado, había manchado su imagen, se había divorciado de Diana dos años antes y ella enloqueció, su amabilidad y cortesía se había esfumado, trató de asesinar a Alivier, a Mayra y de suicidarse, disparando en la casa como una loca enceguecida, pero por fortuna, sus guardaespaldas intervinieron para salvarle la vida a Alivier y su hija.

Diana fue enjuiciada por intento de asesinato, e incluso Elis tuvo la oportunidad de hundirla, le había ofrecido ser la fiscal, la parte acusadora, pero ella se negó rotundamente No tengo nada que ver con esa mujer había dicho, aunque en realidad lo que quería decir era: No tengo nada que ver con esa puta motolita.

Como era de esperarse, Diana se defendió con todo y contó cada detalle que sabía de Alivier, especialmente de Alivier con Elis, como fueron amantes y la engañaron, pero nada de eso la salvó de recibir una condena de veinticinco años por tratar de matar a un ciudadano judicial y a su propia hija, Mayra nunca mas quiso saber nada de ella.

Pero esa enorme mancha en la imagen de Alivier Reinosa, al verse involucrado con una amante y dos hijos de la misma edad, le hizo perder las elecciones, aunque por un corto margen de 48,7% de los votos, ante un 51,3 % de apoyo que obtuvo su adversario y fue así, como durante los últimos cinco años, Alivier Reinosa se dedicó a demostrar con creces, que su vida personal y su trabajo eran campos diferentes, tuvo que esforzarse el triple que sus adversarios para hacerle ver al pueblo de Venezuela, su capacidad como candidato, gobernador y futuro presidente.

Además tuvo la suerte de que su adversario, mientras ejercía como presidente, llevó al país a una ruina casi total, en donde todo era el peor desastre posible, mostrando incompetencia, inutilidad, maldad y egoísmo.

Ahora, cinco años después, Alivier Reinosa había ganado las elecciones presidenciales con un impresionante 57,9% de los votos, mientras su adversario se vio derrotado con el 42,1% de apoyo. El pueblo venezolano necesitaban a un verdadero líder y no al dictador asesino que tenían en ese momento.

En una pequeña y maloliente cárcel del estado amazonas, Diana Monsalve estaba sentada sola mirando la ceremonia por televisión, tras los barrotes de la celda en la que se encontraba, la policía que la custodiaba, había votado por Alivier Reinosa y quería saber si el hombre había ganado, como había festejado su victoria, miró hasta que todo concluyó y Alivier y Mayra dejaron el estrado rodeados de hombres del servicio secreto. Oh, Mayra está preciosa pensó en ese momento, entonces, la oficial apagó la televisión y se fue, dejándola sola en la oscuridad total.

En una pequeña sala de una casa en el estado Trujillo, Elis Irazabal estaba sentada, riendo junto con su esposo Doumasr Constantine y su hijo Luis, quien también había recién cumplido diecisiete años al igual que Mayra, la televisión estaba encendida, transmitiendo la ceremonia, pero a nadie le importaba, nadie en la casa la escuchaba, todos estaban demasiado ocupados en la sala, jugando PICTIONARY MEN, riendo, moviéndose, saltando, haciendo señas raras, incluso después de que la ceremonia concluyó y Alivier y Mayra dejaron el estrado rodeados de hombres del servicio secreto, media hora después, ellos seguían compartiendo, ninguno supo lo que pasaron en la televisión.