Capítulo 121:
A Lingjiao le dolían los pies. A esta altura no sabía si se debía a alguna reacción adversa del embarazo o si simplemente estaba cansada de ir y venir detrás de Jin Ling, pero. ¿para qué quejarse, de todas formas? Si por mucho que lo hiciera, nada le quitaría el dolor de pies. ¿Lo peor? Mientras ella se recorría Yunping de arriba abajo, Wei Wuxian y Lan Zhan deberían estar divirtiéndose en la bañera de la posada tan sólo para entrar casi de inmediato en un flamantemente nuevo conflicto existencial.
En ese sentido, Lingjiao no tenía ni la menor idea de qué demonios había hecho mal. Es decir, durante sus primeros años en Mo Dao, la desdichada había corrido detrás de Wei Ying de un lado a otro y jamás de los jamases perdió la oportunidad de insinuarle a Wei Ying su obvio enamoramiento por Lan Zhan, ni cómo esos sentimientos eran más que correspondidos. Si ella había dejado su alma tratando de despojar de su densidad a Wuxian, ¿¿por qué demonios seguían sin ser novios?? Claro, la escena de confesión en el templo Guanyin sería tan emocionante que se echaría a llorar allí mismo, pero de todas formas le hubiese encantado presenciar a un Wei Wuxian cien por ciento emocionalmente maduro y seguro de su amor por Wangji de forma prematura. ¿Quizá debió insinuar menos y afirmar más? Pero actuar demasiado segura de sí misma habría terminado por despertar todavía más sospechas en la mente de Wei Ying, quien de por sí ya había cuestionado sus verdaderas intenciones en más de una ocasión.
En fin, en el mejor de los escenarios Wei Ying habría aceptado su amor en esa misma habitación en la posada, y en el peor de los casos el hombre habría estimulado tanto su densidad que su muy deseada confesión wangxian no ocurriría como lo planeado. Pero, por favor, si tan bien le había ido desde el comienzo de su plan, no quería pensar que podría llegar a haber arruinado su otp. Ellos dos se veían igual de cercanos que en la novela, después de todo. Y en cuanto al Sistema, ese maldito desgraciado llevaba meses sin aparecer frente a sus ojos. Si el Sistema mantenía su característico silencio de radio, eso significaba que las cosas estaban ocurriendo como era debido, ¿cierto? Ya ni siquiera tenía sentido detenerse a pensar en ello.
Cuando Lingjiao divisó las características túnicas amarillas de su sobrino, la mujer aceleró el paso hacia él. Estaban a tan sólo un par de metros de la calle principal de Yunping, a no más de un muy reducido puñado de minutos del templo Guanyin. Era ahora o nunca.
Entre cultivadores, monjes y comerciantes, Lingjiao agarró a Jin Ling por el cuello de su túnica y tiró de él, acercándolo a su cuerpo.
—¡Jin Rulan!—Jin Ling no gustaba mucho escuchar su nombre de cortesía. En primer lugar porque este solía venir acompañado de un regaño, y en segundo porque le recordaba a toda la gran bola de conflictos relacionados a su madre y Wei Wuxian—. ¿Adónde crees que vas, jovencito?
Jin Ling se escurrió lejos de los brazos de Lingjiao, comenzando al mismo tiempo a correr en dirección opuesta. Si seguía en línea recta, entonces el niño chocaría contra el templo Guanyin y, en su afán por escapar de su tía, se adentraría en la boca del lobo. Podría decirse que a fin de cuentas el niño se reencontraría con su(s) tío(s) tal y como él quería sin importar cuán desafortunadas fueran las circunstancias.
Lingjiao no tenía tiempo que perder, pues bien sabía ella que cuanto más tardara en seguirle el rastro a su sobrino, más incongruente se sentiría su repentina aparición en el templo Guanyin. Fue por eso que la mujer no perdió tiempo a la hora de correr detrás de Jin Ling y su perro, llegando a las proximidades del templo mucho antes de lo que su sobrino hubiese deseado. Fue entonces que Lingjiao ordenó a Corazoncito regresar al Embarcadero de Loto cuanto antes, siendo la presencia temprana de Jiang Cheng estrictamente necesaria para el correcto desarrollo del final. No importaba si ella misma podía o no manejar la situación sola, Jiang Cheng debía pasar por un último golpe de realidad antes de llamarse cien por ciento rehabilitado.
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Los infortunios de transmigrar en una villana secundaria.
FanfictionA la hora de elegir un personaje en el cual transmigrar, los Sistemas suelen priorizar dos aspectos: irrelevancia y maldad. Para hallar una víctima de transmigración, en cambio, el requisito excluyente es padecer una muerte ridícula. Wang Lingjiao n...