Avengers Oneshots III

Quitando tu dolor (Thor Odinson)*

Prólogo: Durante tu periodo tienes cólicos muy fuertes y Thor quiere ayudar.

Emma_Est
Advertencia: menstruación, sexo vaginal durante el periodo, menciones de cólicos, sexo sin protección (pero se hace alusión a pastillas anticonceptivas), vuelvo a repetir que se tienen relaciones sexuales durante el periodo para aliviar los cólicos, sobrenombres, elogios, menciones de fluidos.
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Thor estaba preocupado por ti.

Hace dos días te había llegado tu periodo y tenías mucho dolor.

Thor se había ofrecido para llevarte a Asgard pensando que era algo mucho más grave, pero tu insististe que con las pastillas para el dolor estarías bien ya que era algo natural. Sin embargo los cólicos estaban siendo mucho más fuertes.

Así que Thor como el buen novio que es, comenzó a investigar.

Encontró un libro acerca de los cambios físicos del cuerpo y había todo un capítulo dedicado a la menstruación donde descubrió que mediante las relaciones sexuales podía aliviar tu dolor.

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–¿Mi Lady? ¿Puedo pasar?–Te preguntó con suavidad, golpeando la puerta de tu habitación en tu casa que estaba ligeramente abierta.

–Claro que puedes.–Reíste estando abrazada a su almohada.–¿Está todo bien?

Thor se acercó y se sentó junto a ti en la cama en el borde para verte.

–Lady T/N, querida mía... desde que me hiciste saber acerca de que habías comenzado con tu periodo de menstruación, decidí que sería bueno investigar sobre distintos métodos de cómo podría ayudar yo a aliviar ese dolor que tanto te atormenta teniendo en cuenta que las píldoras mágicas de Midgard no son de ayuda.–Te explicó con seriedad, tomando tu mano en la suya para dejarla en su regazo.

–Okey... ¿y qué encontraste?–Reíste ligeramente, tratando de ocultar el dolor que estabas sintiendo.

–Amor de mi vida... te propongo que tengamos relaciones sexuales aquí y ahora para probar lo que dice el libro y aliviar tus "cólicos".–Te dijo con seriedad.

–¿Q-qué? Disculpa... déjame ver si entendí bien...–Dijiste soltando una risita nerviosa y sentándote en la cama.–¿Me estás proponiendo que tengamos sexo durante mi periodo?

–En efecto así es, mi Lady. Eres una mujer muy inteligente.–Te dijo con una gran sonrisa de enamorado.

–P-pero Thor... cariño... ¿si te das cuenta de lo desastroso, desagradable y sucio que va a ser?–Le preguntaste jugando nerviosa con tus manos.

Thor te ofreció una sonrisa y tomó tus manos en las suyas para besarlas con suavidad, y luego verte a los ojos con un brillo en los suyos.

–Amada mía, nada de ti podría jamás disgustarme o parecerme desagradable. Esto es un proceso natural de tu cuerpo, el cual te causa dolor y yo quiero ayudarte a aliviarlo, si me lo permites.

Inhalaste profundamente ya apretando tus piernas juntas con tan solo escuchar sus palabras.

Honestamente desde pocos días antes de tu menstruación, e incluso en esos momentos habías estado bastante necesitada de Thor, pero te daba vergüenza y temor preguntarle en caso de que no aceptara.

–Entonces luz de mi vida, ¿aceptarías tener relaciones sexuales conmigo para así—

–¡S-si, Thor! No es necesario que des toda la explicación de nuevo...–Le dijiste nerviosa.–A-aunque vamos a necesitar una toalla...

–¡No hay de qué preocuparse, amada mía! Tu déjame eso a mi, y prepárate para relajarte.–Te dijo con una gran sonrisa dejando un beso en tu frente antes de ponerse de pie e ir a buscar la toalla.

Tu solo reíste ligeramente y comenzaste a quitarte la ropa algo nerviosa aún.

(.....)

Thor había colocado la toalla en la cama y te recostó en ella ya desnuda, abriendo tus piernas con suavidad exponiendo tu parte baja con sangre.

–Por todos los dioses... esto es... e-esto es maravilloso...–Murmuró boquiabierto viendo fijamente tu intimidad, él también estando desnudo y su miembro erecto chocando contra su abdomen.

Sentías tanta vergüenza en esos momentos al estar tan expuesta ante él, pero sabías que estabas segura.

–Por favor mi Lady, hazme saber si no te estás sintiendo cómoda con esto.–Te dijo con suavidad dejando un beso en tu rodilla y viéndote a los ojos.

–¿No debería yo decirte eso?–Le preguntaste con una pequeña risita.

–Oh créeme amada mía, no vas a escuchar una queja de mi porque lo voy a disfrutar tanto como tu.–Te aseguró con una sonrisa y arrodillándose en la cama.

Poco a poco Thor comenzó a deslizarse dentro de ti con facilidad debido a la sangre y tu humedad.

Soltaste un gemido ante la sensación que llevabas esperando poder sentir desde hacía casi una semana.

Una vez llegó al fondo, Thor se quedó quieto por unos segundos para darte tiempo de acostumbrarte, y pronto comenzó a moverse dentro y fuera de ti viendo maravillado como su miembro quedaba manchado.

–T-thor más rápido... por favor...–Gemiste algo avergonzada.

–Tus deseos son mis órdenes, amada mía.–Dijo con una sonrisa apoyando una mano junto a tu cabeza y la otra tomó tu pierna.

Thor se acercó y besó tus labios mientras sus embestidas empezaban a ser mucho más rápidas y fuertes.

Enredaste tus manos en su cabello, jalando de él mientras que otros mechones caían en tu rostro.

Enrollaste ambas piernas en su cintura mientras que él dejaba sus manos en ellas para sujetarla y acariciarlas.

Comenzó a dejar besos por tu cuello hasta llegar a tus pechos donde metió uno en su boca y comenzó a succionar con suavidad de una forma que aliviaba el dolor en ellos.

Arqueaste la espalda soltando un gemido, mientras sentías que tu orgasmo se aproximaba vergonzosamente rápido.

–Por favor mi Lady, no te contengas... déjate llevar por el placer que estamos sintiendo...–Te susurró al oído, acelerando sus movimientos.

–M-mierda Thor...–Te abrazaste a su cuello, gimiendo y arqueando la espalda mientras te corrías a su alrededor.

–¿P-puedo... puedo... a-adentro...?–Te preguntó sin realmente poder formar una frase coherente.

–Adelante... estoy... e-estoy con... pastillas...–Dijiste agitada entre fuertes respiraciones agitadas y aún muy ebria de placer.

Thor finalmente se corrió dentro de ti tratando de llegar lo más profundo posible y gimiendo en tu oído.

Una vez se vació por completo, acarició tus piernas con delicadeza y se alejó ligeramente para besar tus labios con ternura.

Thor salió de dentro tuyo con mucho cuidado y se quedó viendo por unos segundos como sus fluidos mezclados más tu sangre chorreaban fuera de ti, y su miembro había sido manchado por ellos.

–Esto fue... maravilloso... ¿cómo te sientes, mi Lady?–Te preguntó recostandose a tu lado y abrazándote para dejar tu cabeza en su pecho, acariciando tú espalda.

–Mucho mejor... gracias por esto.–Le dijiste abrazándolo de vuelta y dejando un beso en su pecho.

–No hay nada por lo que tengas que agradecer, estoy más que feliz de aliviar y quitar tu dolor. Cuando sea, y sin importar lo desastroso que sea.–Te aseguró con una sonrisa, alejándose para verte a los ojos con un brillo en ellos.

Tu solo reíste ligeramente y acariciaste ambas de sus mejillas con suavidad, para luego dejar un beso en sus labios y volver a abrazarte a él.