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Capítulo 38

Confesiones Confusas

Karla

-¿Que piensas? -pregunta y casí me ahogo con mi propia saliva, me volteo y lo veo quitándose la ropa y mirándome con picardía, me sonrojo y se lleva las manos al pantalón, lo baja y lo avienta, se sube encima de mí y pone su rostro en mis pechos, pareciera que esta... ¿oliendo?-¿Puedo?

-Hazme lo que quieras -digo rindiendome y me mira pervertido, sus dedos caminan hasta llegar a mi sostén, acaricia los bordes y me levanta, lo desabrocha con rapidez y lo avienta a no sé donde, en un abrir y cerrar de ojos ya está prendido de mis pequeños pechos, cierra los ojos de vez en vez como si fuera lo más delicioso-No te... ha... ¿dicho nada tu padre?

-Sí -se detiene y me mira-La llevaron a comer y con especialistas para que la estén tratando.

No digo nada y se prende del otro, me gusta como me devora, siempre sin perder ese deseo, esas ansias.

Abro las piernas para que tenga más acceso a mi cuerpo, su otra mano baja a mi falda y la intenta desabrochar, lo logra y me la saca, me mira de pies a cabeza y le brillan los ojos, de repente cambian a un azul más oscuro, ese tono que toma cuando está ansioso; manda el boxer a volar y me quita las bragas, me preparo para recibir su potente erección pero...

-Me gustas más cuando te sientes cómoda diciéndome las cosas como son -dice y deja besos tiernos en mi abdomen, baja hasta mi entrepierna y lame, le aparto el rostro y me mira-¿Que? Sabes delicioso...

-Vampiro -digo divertida y se acerca a mí nuevamente, se lame los labios y me abre las piernas-¿Asher no te da asco?

-Nada de tí me da asco -dice como si nada y me mira-Al contrario y sabe rica tu sangre...

-Lo sé, pero no es lo mismo la regla que sangre -digo y sonríe pervertido.

-A mí me gusta -insiste y me pega a él-Es como mermelada sabor a sangre...

-¿Te gusta tanto la mermelada? -pregunto riendo y me besa el cuello, me arqueo y siento el roce de su miembro en mi clítoris-Asher...

-¿Sí nena? -me mira y río-No me gusta tanto como tú, tú eres lo más delicioso que existe.

Baja a mi entrepierna nuevamente y gimo cuando lame esa parte, lo miro, está tan entretenido, a mí me daría asco lamer la menstruación de alguien, incluso la mía, pero sentir su lengua ágil y húmeda sobre mí, me hace temblar completamente; mete un dedo en mi interior y gimo más fuerte, es incontrolable todo lo que me provoca hacer.

-Que rica mermelada -dice lamiendose los labios y vuelve a lamer, dios, es el puto paraíso tener sus labios, sus dedos o su miembro en esas partes; sigue y sigue hasta que alcanzo el punto máximo y exploto mientras gimo su nombre una y otra vez, su lengua haciendo maravillas y su dedo penetrandome, es demasiado para mí; sigue y provoca que me tiemble el cuerpo, se despega y me besa con agresividad, me enciende hasta la última célula y siento su grosor en la entrada de mi coño húmedo, siento como se desplaza dentro, cada centímetro de su miembro en mi interior-Fuuuck... me encanta lo apretada que estás...

Vuelve a mis labios y entra y sale, una y otra vez, baja a mi cuello y succiona excitandome más, sigue bajando y se prende de mis pechos mientras me penetra con más fuerza, más velocidad.

Sus labios tocan los míos y acallan un poco mis gemidos, siento venir el orgasmo, como se pone más duro y grueso en mi interior anunciando que ya va a terminar, me encanta que estemos en la misma sintonía siempre y terminemos igual.

Nuestro Mix De Amor +18 (Comienzos)💋✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora