Erotic Melancholia

CXIX

Zayn había salido al patio en silencio, como solía hacer cuando necesitaba un momento de tranquilidad. Harry, notándolo, decidió seguirlo con paso igual de discreto. El aroma a tabaco llenaba el aire, mezclándose con la fresca brisa del atardecer, y los sonidos distantes de la fiesta en el interior parecían amortiguarse. Desde que todo había salido a la luz casi dos años atrás-los escándalos de la industria, las mentiras que los rodeaban-su relación con Zayn había cambiado. La tensión que antes existía entre ambos había desaparecido lentamente.

Zayn encendió su cigarrillo con un gesto relajado, exhalando el humo que se mezclaba con la tierra mojada que aún impregnaba el ambiente del patio.

-¿Qué sucede, Styles? -preguntó, prendiendo el cigarro con su mirada fija en el horizonte.

Harry se quedó un segundo observándolo, pensando en cómo las cosas habían cambiado entre ellos. Sabía que Zayn nunca lo había odiado de verdad, pero sí le guardaba rencor por lo que había pasado con Louis. Era lógico, después de todo, Louis no era solo un amigo para Zayn; era como su hermano, su omega, alguien por quien haría lo que fuera. Pero el tiempo, las conversaciones honestas, y el dolor compartido habían sanado viejas heridas.

Harry se acercó un poco más, apoyándose contra la barandilla del patio.

-No mucho... solo quería salir a respirar un poco -respondió, con una media sonrisa-. ¿Y tú? ¿Todo bien?

Zayn le lanzó una mirada rápida, pero no era dura como antes. Asintió, llevándose el cigarrillo a los labios nuevamente.

-Sí, todo bien. Es... raro estar aquí de nuevo, con todos. Pero me alegra que Louis esté feliz. Y tú también -añadió, sin mirarlo directamente, pero el gesto era sincero.

Harry exhaló, sintiendo el alivio de esas palabras. Sabía que la aceptación de Zayn significaba mucho, no solo por Louis, sino porque el lazo entre ambos había estado roto por demasiado tiempo.

-Gracias, Zayn... De verdad, significa mucho -murmuró Harry, las palabras sinceras y un tanto cargadas de emoción contenida.

Zayn asintió, tirando la ceniza del cigarrillo antes de mirar por fin a Harry, más relajado que de costumbre.

-Louis es mi hermano, Styles. Si él confía en ti, yo también lo haré. Solo... cuídalo, ¿si? -susurró Zayn, la petición clara, aunque innecesaria.

Harry lo miró a los ojos y asintió sin dudar. Sabía que haría lo que fuera por Louis.

-Lo haré.-

El rizado se acercó más, su mirada fija en el suelo mientras intentaba ordenar sus pensamientos. El silencio que compartían estaba cargado, pero no incómodo. Podía sentir el aroma del tabaco que Zayn fumaba, mezclándose con el olor a tierra húmeda. El frío del atardecer comenzaba a instalarse, pero Harry apenas lo notaba. Había algo más pesado sobre sus hombros, algo que llevaba tiempo cargando y que finalmente estaba dispuesto a soltar.

-Yo... em... -empezó Harry, su voz temblando ligeramente, algo muy raro en él-. Quería hablar contigo, porque... no sé si es un buen momento. Con Oli, la música, Londres... tú sabes, no quiero abrumarlos -sus palabras salían desordenadas, como si intentara encontrar el camino adecuado para llegar a lo que realmente quería decir.

Zayn lo observaba en silencio, levantando una ceja, claramente intrigado. No era usual ver a Harry tan nervioso, menos aún cuando se trataba de algo tan personal.

Harry se pasó una mano por el pelo, exhalando con fuerza, y de repente soltó lo que tanto había estado guardando.

-Quiero pedirle matrimonio a Louis -dijo finalmente, su voz más firme, pero aún cargada de la tensión acumulada-. Antes de que naciera Oli hablamos de ello... que yo quería casarme con él.

Zayn no dijo nada al principio, solo se quedó allí, mirándolo con una mezcla de sorpresa y comprensión. El humo del cigarro danzaba en el aire entre ambos, creando una especie de cortina que añadía aún más peso a la conversación.

Harry continuó, esta vez mirando a Zayn a los ojos, buscando alguna señal, alguna reacción que le diera una pista de lo que el otro hombre podría estar pensando.

-Pero... ahora, con todo lo que ha pasado, no sé si es el momento adecuado. No quiero presionarlo, no quiero que sienta que tiene que hacer esto solo porque tenemos un hijo. Quiero que lo haga porque realmente quiere -confesó, su corazón acelerándose con cada palabra.

Zayn exhaló el humo lentamente, apagando el cigarrillo con un movimiento tranquilo antes de girarse hacia Harry, cruzándose de brazos.

-¿Y por qué crees que no es el momento adecuado? -preguntó con su tono habitual, directo pero sin juzgar-. ¿Acaso te ha dado alguna señal de que no quiere eso?

Harry negó con la cabeza, sus hombros tensos.

-No... no realmente. Solo... es mucho. Todo ha cambiado tan rápido -admitió-. Tenemos a Oli, la mudanza de nuevo a Londres, y yo apenas duermo porque no dejo de escribir. No quiero abrumarlo con una propuesta en medio de todo esto.

Zayn se acercó un poco más, observando a Harry con detenimiento antes de responder.

-Mira, Styles... Louis siempre ha sido claro en lo que quiere. Si te ha dicho que quiere casarse contigo, créeme, lo quiere. No lo va a decir por decir -Zayn lo miró de forma significativa-. Si crees que es el momento, hazlo. La vida no se detiene, y si esperas el "momento perfecto", puede que nunca llegue.

Harry lo escuchó con atención, dejándose envolver por el peso de las palabras de Zayn. Sabía que tenía razón. Louis no era alguien que dejara las cosas a medias, y si alguna vez había hablado de casarse con él, era porque lo sentía de verdad.

El aire a su alrededor parecía un poco más ligero ahora. Harry asintió lentamente, absorbiendo cada palabra.

-Gracias, Zayn -murmuró, dándose cuenta de cuánto había necesitado esa conversación.

Zayn esbozó una pequeña sonrisa, casi imperceptible, antes de darle una palmada en la espalda.

-De nada. Solo no te equivoques con el anillo, ¿eh? Louis tiene buen gusto.

Harry soltó una risa, suave pero genuina, sacudiendo la tensión que llevaba acumulada. El comentario de Zayn, inesperadamente sencillo pero lleno de verdad, le arrancó una sonrisa que no había podido mostrar en toda la conversación.

-Louis ha sido tuyo desde el momento que nació -continuó Zayn, con ese tono seguro y directo que siempre lo caracterizaba. No era una exageración ni una broma; para Zayn, era un hecho inamovible, algo que se podía sentir en el aire, como el lazo que los unía.

Harry negó con la cabeza, aún riendo ligeramente, mientras se pasaba una mano por la nuca. Sabía que Zayn tenía razón en cierto modo, pero escuchar esa afirmación de alguien que conocía a Louis tan bien, le hacía sentir aún más real la magnitud de lo que compartían.

-Es increíble pensar en todo lo que hemos pasado -admitió Harry, su voz más suave ahora, mirando hacia el suelo como si las memorias desfilaran ante él-. A veces siento que no soy suficiente para él... pero luego miro a Oli, y pienso en lo que hemos construido juntos, y no puedo imaginar la vida sin ellos.

Zayn asintió, tirando el cigarrillo apagado al suelo y aplastándolo con el pie.

-Louis no es alguien que se conforme con menos de lo que quiere. Y lo que quiere eres tú, Styles. Eso ha sido evidente desde el principio -Zayn lo miró a los ojos, ofreciendo ese apoyo silencioso que solo alguien como él podía brindar.

Harry sonrió, esta vez con más confianza, sintiendo que las piezas comenzaban a encajar.

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