Invencibles

Capítulo 97

CAPÍTULO 97

*narra Bruno*

Me despierto aturdido, otra vez he vuelto a soñar con Martu. Me levanto de la cama y alzo las persianas, ignorando un gruñido de mi compañero de habitación, Xavier.

Xavier: ¿Por qué me despiertas? Estaba teniendo un bonito sueño con Martu. - <<Ups, como yo>>, pienso, sintiéndome realmente culpable. No sé qué significará todo esto, solo sé que no es bueno. Decidido a evitar a mi mejor amigo, me visto rápidamente para ir a desayunar. - Tío, ¿me vas a esperar?

Bruno: Paso, ¡tardas mil años! Nos vemos en el comedor.

Cierro de un portazo antes de que pueda replicar y me doy un cabezazo contra la puerta, para intentar que todos mis pensamientos hacia Martu, hacia la chica de la que está enamorado mi mejor amigo, se esfumen. Me restriego con la mano la parte dolorida y cierro los ojos, su mirada penetrante como el océano vuelve a clavarse dentro de mí. Mierda. No ha funcionado. Me doy repetidos cabezazos contra la pared, exhibiendo mi locura, hasta que alguien repara en mí.

Lukas: Que vas a romper el edificio, ¡cabezón!

Bruno: Rompería el edificio y seguiría con Martu en la mente. - susurro, con miedo a que nos oiga alguien - Anda, vamos a desayunar por favor.

Lukas intenta ser la persona chistosa de siempre, pero se le nota apagado, nuestro profesor de sociales le ha obligado a quedarse todas las tardes después de clase durante una semana por haberle contestado el otro día. Pero eso es lo que menos le importa. Comparado con lo suyo, lo mío es una verdadera tontería.

Llegamos al comedor, nos servimos el desayuno y nos sentamos en una mesa con nuestros compañeros. Cuando estoy a punto de saborear mi deliciosa tostada, la traidora se sienta a mi lado.

Chloe: Bruno. - me llama, pero yo la ignoro - Bruno, tienes que escucharme.

Bruno: ¿Por qué debería hacerlo? - le doy un mordisco a la tostada.

Chloe: Tienes que acompañarme, es muy importante.

Bruno: ¿A dónde? ¿A una de tus trampas?

Chloe: Mira, sé que estuvo fatal lo que hice, pero estoy intentando arreglarlo. Si no me acompañas te arrepentirás. Te espero fuera.

Se marcha de mi lado y le doy otro mordisco a la tostada, pero es como si estuviera masticando una goma. Todavía me duele todo lo que me ha hecho Chloe, si estoy así es por su culpa. Además, la echo de menos, éramos muy buenos amigos, pero no es justo, joder, no es justo. Lukas me da un codazo, dándome a entender de que debería ir, sé que tiene razón, pero hay algo, no sé el qué, que me echa atrás.

De repente, sus ojos se cruzan con los míos, nos sonreímos tímidamente y sé que si sigo mucho rato más mirándola voy a debilitarme, que nunca más se irá de mis sueños. Así que me levanto de ahí, dispuesto a evitarla a ella también.

La fría brisa me golpea en todo mi rostro y busco a Chloe, pero no la encuentro en ninguna parte. ¿He vuelto a caer en otra de sus trampas? Saco mi móvil del bolsillo y fijo mi vista en él, Itzi todavía sigue de fondo de pantalla, ¿por qué no la he cambiado ya? Yo lo sé, porque al verla intento convencerme de que todavía la quiero y de que lo de Martu fue solo un desliz. Alguien se abalanza sobre mí y me caigo al suelo. Me susurra múltiples <<Lo siento>>. Ese aroma a lavanda...

Bruno: ¡Itzi! - exclamo, sus brazos todavía me envuelven. Atónito por su inesperada visita y su efusividad, consigo que nos sentemos en un banco y que me explique a qué se debe su repentino cambio de opinión.

Me explica que Chloe contactó con ella explicándole toda la verdad, al fin y al cabo estaba arrepentida y siempre será una buena amiga. Nota mental: hablar con ella, intentar no mostrarme tan dolido y recuperar al menos una pequeña parte de lo que teníamos. Itzi me explica que escuchó todos mis mensajes de voz, incluidos los de cuando estaba borracho, no puedo evitar pensar en Martu. Me confiesa que se siente una idiota por haber sido tan cabezona y no haber creído en mí, pero que aún estando enfadada conmigo no podía parar de pensar en nosotros.

Itziar: Por favor, olvidemos lo que ha pasado, volvamos a lo de siempre. Esto solo nos ha hecho más fuertes. Además, he hablado con mis padres y me han dicho que me dejarán venir más fines de semana a verte.

Sin esperar a mi respuesta, me besa con fuerza, no os voy a negar que en mi interior se agitan diversos sentimientos, que ella y su aroma a lavanda me hacen sentir a salvo. Pero no podemos volver a lo de siempre. Algo ha cambiado. Sin embargo, quiero intentarlo. Itzi siempre ha sido mi chica, me quiere y está dispuesta a luchar por nosotros. Esta vez irá todo mucho mejor.

Además, mi mejor amigo no está enamorado de ella.