Capitulo 84: Pequeña Pintura

7 1 0
                                    

BRISIA

Ya partimos en nuestro viaje hacia las montañas, se me hizo triste no haber podido pasar más tiempo con Nora, luego de nuestra reunion se fue con el viento sin dejar ningun rastro de su presencia, ni siquiera le dije adios, deberia acostumbrarme ha recibir eso de ella, después de todo me dijo qué me mantuviera alejada de ella... Por ahora... 
Aunque tampoco estoy del todo triste una parte de mi también está preocupada, puede qué tenga cosas en la cabeza pero no estoy del todo distraida, he notado ha Tadeo qué está un tanto pensativo, tiene su mirada agachada cómo si estuviera viendo en suelo bajo los cascos de su caballo, voy detrás de el montando mi caballo pero no estoy del todo sola montando el caballo, sentado enfrende de mi está Aiden, mi amiguito de fuero ha regresado después de tanto tiempo, no tengo la menor idea de donde sea metido pero es bueno verlo de nuevo.

Zoe: Aun nos falta un largo camino por recorrer, pero los caballos necesitan alimentarse y descansar al igual qué nosotros.

Natty: Les parece hacer un campamento en este lugar para pasar la noche.

Tadeo: Es una zona adecuada para armar unas tiendas, hagasmolo antes de qué caiga la noche.

Mientras el resto arman las tiendas, me adentro al bosque junto ha Beltrán para recolectar algunas ramas para encender una fogata para estar calientes está noche, no puedo evitar sonreir al ver ha Aiden intentando ayudarme, en su pequeño hocico carga dos ramas gruesas, viene caminando ha mi lado con algo de dificultad ya qué las ramas son más largas qué el mismo, los qué daria por tener mi celular en estos momentos para sacarle unas cuantas fotos.
Bueno... De hecho cargaba con mi celular cuando regrese ha este mundo, puedo hacerlo aparece ya qué lo traia al momento de venir ha este mundo lo hago desaparecer por volumtad propia pero siempre regresa ha mi cuando regreso ha mi mundo, nuna he intentado sacarlo dentro de los mundos de los libros, por obvias razones mi celular no le van ha servir ciertas funciones pero la camara si le va ha funcionar.
Observo ha mi alrededor, buscando con la mirada ha mi compañero, nos separamos para recolectar la leña más rápido, por eso no consigo verlo cerca de mi, es ahora o nunca, debo aprovechar está oportunidad, me agacho para colocar la leña que he recolectado en el suelo ha mi lado, chasqueo los dedos en seguida en mi mano aparece mi celular, rapidamente pongo la camara con tan solo deslizar mi dedo hacia arriba desde la esquina izquierda, sin tener la necesidad de ingresar mi contraseña.

Brisia: Aiden, voltea ha verme.

En cuento Aiden gira su cabeza para verme, presiono la pantalla para tomarle la foto, se me ilumina la mirada al verlo sentarse he inclinar la cabeza hacia un lado, le saco unas cinco fotos en posees diferentes, pongo la contraseña numerica para entrar ha mi galeria ha revisar las fotos, solo una salio un poco borra porque sea movido, la elimino me conformo con las cuatros fotos buenas qué he obtenido, mientras reviso mi galeria se me ocurre mirar las fotos viejas, la mayoria son de mis salidas con Alex, me pasaba gran parte del dia con el, también bellos lugares los cuales he visitado en mis viajes escolares, decido ir hasta la últimas fotos, sonrio levemente cuando veo mis viejos recuerdos con mis padres, me detengo en una en donde estoy sentada sobre los hombros de mi padre, ha nuestro lado está mi madre saludando ha la camara, ese dia fuimos ha unas aguas termales, detrás de nosotros se ven las aguas termales y el vapor elevandose por el aire.

Beltrán: ¿Qué es esa cosa?.

Doy un leve grito al mismo tiempo en qué doy un salto para girarme, por Dios... No lo escuche venir, me distraje tanto mirando las fotos qué apague mi sentido del oído, me quede en un estado vulnerable, demonios... Mis pies chocan contra las ramas recolectadas, mi cuerpo se inclina hacia atrás, golpeando mi espalda contra el suelo, de mis labios sale un jadeo de dolor mientras me siento en el suelo, observo mi alrededor, mientras caia solte mi celular, debo encontrarlo, en eso veo ha Beltrán arrodillarse ha pocos metros de distancia de mi, lo veo tomar mi celular, sus ojos están puestos en la pantalla, me pongo de pie mientras me sobo la espalda baja.

Beltrán: ¿Es una pintura?.

Brisia: Ahhh... Algo asi, es un aparato de mi pueblo, rara vez lo uso.

Beltrán: ¿Quienes son estás personas?, ¿tus padres?.

Brisia: (Sonriendo) Sip, ese dia estuvimos en unas aguas termales. 

Beltrán: Se te ve muy alegre, estás tan feliz cómo cuando vez ha Tadeo, debo admitirlo de recien qué llegaste apenas y sonreias y cuando lo hacias no tenias ese brillo en la mirada, esa chispa en ti, comparada con la antigua tu, te vez muy diferente en el buen sentido.

Brisia: Creo qué ya lo habia dejado en claro en el pasado pero te lo vuelvo ha repetir, yo llegue ha estás tierras con el corazón dañado, ustedes y todos los nuevos amigos qué he hecho en este mundo me han ayudado ha sanar.

Beltrán: Tú madre es hermosa, ya vi de donde haz sacado tú belleza, aunque no encuentra parecido con tú padre, tienes todo el parecido de tú madre.

Brisia: Todo el mundo me dice eso.

Antes de regresar al campamento le hago prometer ha Beltrán no decir nada sobre el celular, el parecia confundido al respecto pero me dio su palabra, las tiendas ya están armadas están hechas de tela, sostenidas con palos de madera, sogas y estacas pequeñas de madera, yo me encargo de colocar bien la leña para encender la fogata, le dedico una mirada ha mi pequeño amiguito de fuego, cuando le doy la indicación enciende la punta de su cola y la pasa por la leña encendiendo la fogata al instante.
Tadeo y Alonso no se ven por ningún lado, le pregunte ha Zoe sobre su paradero al parecer fueron ha buscar la cena, no ahi muchos animales salvajes por está zona del bosque, pero se tenia qué hacer un intento para no dormir con el estómago vacio, pasan unos minutos cuando veo ha los chicos volver con unos conejos, después de todo si tuvieron algo de suerte.

Mmm... ¿Qué hora es?, abro lentamente los ojos, al principio todo es borroso y oscuro, parpadeo un par de veces hasta eliminar la parte borrosa, mis ojos están fijos en el techo de tela de mi tienda improvisada, aun es de noche, pero no está del todo oscuro puedo ver las sombras qué han formado las llamas de la fotaga, estoy acostada sobre mi espalda con mi cabeza sobre una tela qué he doblado varias veces para qué me sirviera de almohada, giro mi cuerpo para acostarme sobre mi estómago, me dormi con la cabeza en la en la habertura de mi tienda, todos nos hemos colocado alrededor de la fogata formando un circulo, me dan envidia, todos aun siguen dormidos.
Busco entre mis cosas en el saco de piel qué uso cómo mochila, saco mi mano cuando consigo sentir la cosa qué estaba buscando, el reloj qué me dio mi padre, doy un largo suspiro al ver la hora, 2:47 am... Debo de estás loca cómo para estás despierta ha esta hora de la noche, apoyo mi barbilla sobre mi almohada improvisada, la abrazo y cierro los ojos intentando dormir.

Voz Masculina: (Susurro) Brisia... Brisia...

Abro mis ojos de agolpe al escuchar una voz misteriosa qué me está llamando, al principio crei qué se trataba de una broma de mi mente cansada por la falta de sueño, pero no fue asi, ha lo lejos del otro lado del campamento veo una sombra oscura moverse entre los árboles, salgo de mi tienda mientras me voy poniendo las botas, quiero asegurarme de qué no se trate de una broma de mi mente, camino hacia los árboles del bosque en donde vi ha aquella figura moverse, me senti aliviada al no ser capaz de encontrar algo, nada más qué el bosque tranquilo, me doy la vuelta para volver ha mi tienda para dormir, al momento de girarme me quedo sin aliento ante lo qué estoy viendo, veo unas grandes serpientes de escamas negras con ojos rojos rodeando ha mis amigos y al grupo qué nos acompaña, se encuentran demasiado cerca de ellos, por la energia qué emiten sus cuerpos se trata de magia oscura, cómo los lobos salvajes.
Abro mi boca para intentar despertarlos pero no llego ha pronunciar ni una sola palabra, una mano me cubre la boca desde atrás, me quedo tiesa en el lugar en el qué estoy, no muevo mi cuerpo, solo cierro las palmas de mis manos para acumular magia hacer un contra ataque pero me detengo cuando...

Voz Siniestra: (Se acerca ha su oído y le susurra) Si no vienes conmigo voluntariamente, haré qué las serpientes los ataquen, moriran al instante con el veneno de sus colmillos, ¿deseas arriegarte Brisia?.

Amor De FicciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora