Amor De Ficción

Capitulo 3: Hombre Murciélago

Ahhh... Un aire puro y limpio, comparado con el aire de la ciudad, esté bosque es más hermoso que en los cuentos de Caperucita Roja, Bambi, Blanca Nieves y otros cuentos que he leído en mi vida, todo está zona del bosque están verde y lleno de vida, aunque sigo sin saber que tipo de personaje soy, ¿una arquera? ¿una cazadora? ¿una guerrera?... Lo bueno es que tengo experiencia usando el arco, digamos qué el mismisimo Robin Hood me ha enseñado un par de trucos todas las veces que visite su mundo, fue cansado tener que repetirle mi nombre, ya que cada vez que salgo de una historia mi presencia es olvidada, mamá dijo que era para mantener nuestro don oculto incluso para los personajes de los cuentos, ya que ahí monstruos, brujas y otros villanos que pueden hacerme daño en estos mundos, recuerdo bien que el villado que me da más miedo es Maléfica, su forma de dragón... En el cuento y en la pelicula solía ponerme los pelos de punta de niña.

¿Qué es ese sonido?, cascos de un caballo, son muchos... Me subo ha la copa de un árbol para ocultar mi presencia, me coloco detrás de las hojas, no se de que se trata está historia, es mejor que primero de un vistazo desde la distancia, antes de intentar hacer algo.
Enfrente de mi pasa un batallon de lo que parece ser unos caballeros que visten una armadura, tienen espadas, otros lanzas y escudos, todos están montando caballos cafés y negros, excepto uno que debe ser el líder que cabalga en un caballo blanco, el grupo se detiene cerca del árbol en donde estoy.

Líder: Se dice que la Cazadora De Monstruos habita esté bosque, no regresaremos al castillo sin haberla encontrado antes, ¡entendido!.

¿Cazadora De Monstruos?, qué era lo que decía el libro en los únicos dos renglones que tiene, iba algo así... De que necesitaban ha la Cazadora De Monstruos para salvar el Reino... Esto se está poniendo cada vez más interesante, si ahí caballeros en este bosque cerca debe de haber un reino del que hayan salido.

Cuando los caballeros se dividen y se alejan de mi, no pierdo tiempo en bajar del árbol de un solo salto, aterrizo de pie doblando mis rodillas, luego me hecho ha correr en la dirección en la que vinieron los caballeros, los bueno que fueron muy amables en dejar las huellas de los cascos de sus caballos, me toma casi 30 minutos seguir las huellas hasta terminar encontrando la salida del bosque, ahí un camino principal de piedra que lleva hacía un puente, desde lejos puedo ver carretas, personas y caballeros cruzando el punte para entrar en un pueblo, ahí un enorme río que separa el bosque del pueblo.
Guau... Simplemente asombrada, este puedo tiene casa pequeñas hechas de piedra y madera, puestos en la callere de curiosidades, comida, joyeria y más, las calles están un poco llenas, tal vez se esté celebrando algo, ahí niños corriendo por la calle jugando con unas espadas de madera, sin duda este cuento debe ser medieval, no veo ningún castillo, quizás sea un pueblo remoto, lejano del castillo, aun me queda mucho por explorar en esté mundo.

Mujer: (Horrorizada) ¡Ahhh! ¡Un monstruo!

Hombre: ¡Todos esconderse en sus casas!

El suelo empieza ha temblar, debido ha que todas las personas comienzan ha entrar en panico, las mujeres toman ha los niños y se van corriendo, los hombre sacan unas espadas esperando contrar atacar, pero contra quien, por instinto corro hacía un callejon entre dos casas y pego por completo mi espalda mientras asomo mi cabeza.
Debe de ser una broma, eso es un ¿hombre murciélago?, una especie de hombre con cuerpo de piel gris oscura, con enorme alas en vez de brazos, una cabeza con orejas puntiagudas, ojos negros por completo sin nada de pupila, filosos colmillos, tiene un pantalón rasgado, en vez de pies humanos en sus dedos tiene garras y son más largos.
Esas criaturas, ¿no son nocturnas?, un segundo no ahí luz del sol, levanto la mirada para ver el cielo, es de día pero ahí un pequeño problema, el cielo está cubierto de nubes oscuras que bloquean por completo los rayos del sol, por todas las peliculas que he visto se que estás criaturas son debiles ante la luz del sol, pero sin el...

Los hombres del pueblo intentan detenerlo pero... el hombre murciélago extiende sus enorme alas y golpea ha los hombres que intentan atacarlo, veo con mis propios ojos cómo uno impacta su espada contra una de sus alas y solamente consigue agrietar la espada, con el segundo golpe se termina rompiendo, su piel es increiblemente resistente, para mi horro soy testigo de cómo el monstruo da un fuerte grito espantoso y vete en su boca por completo la cabeza del hombre con la espada rota, su cuerpo cae al suelo formando un enorme charco de sangre debajo de el, otro hombre intenta detenerlo pero el monstruo aletea levantandose en el aire y con sus patas toma al hombre, lo empuja contra el suelo y con las garras de su ala le destroza el rostro, incluso soy capaz de ver el hueso del craneo.

Es la primera vez en mi vida en la que siento miedo de estar en un mundo de fantasía, nunca me he metido en un libro de novela de terror para no terminar viendo estó, es una maldita sangria, debo irme de aquí antes de que yo termine siendo otro  cadaver en el monton, estaba apunto de decir las palabras para volver ha mi mundo fuera del libro, en eso escucho un fuerte grito, ¿de un niño?, me vuelvo asomar para ver que el hombre murciélago toma con sus patas aun niño qué estaba corriendo por la calle y lo levanta en el aire, la madre grita desesperadamente mientras corre detrás de el, pero los hombre la detienen diciendo qué "ya es demasiado tarde" la podre mujer se deja caer de rodillas mientras llora desconsoladamente, no puedo permitirlo, mi cuerpo se empieza ha mover por su propia cuenta.

Salgo de mi escondite y comienzó ha seguir el monstruo, es muy rápido no voy ha conseguir alcanzarlo ha pie, ha menos de qué... Veo una cuerda enrollada en el cuello de un caballo, me acerco ha el para tomarla, se ve lo suficientemente larga, sola tengo un tiro y es una verdadera locura lo que voy ha intentar hacer, de un salto subo en la espalda del caballo, no tiene asiento pero me basta con qué tenga solamente las riendas, lo hago cabalgar detrás del hombre murciélago, mientras yo me sostengo con mis piernas al caballo, uso mis manos para tomar una flecha de mi carcaj, ato un extremo de la cuerda en la flecha, el otro extremo lo ato alrededor de mi cintura, en estos momentos me no arrepiento de haber pasado la mayor parte de mi tiempo en la gimnasía en la barra de equilibrió, apoyo mis manos sobre el caballo y rápidamente doblo mis piernas para subirlas, con cuidado me voy poniendo de pie mientras el caballo sigue corriendo ha gran velocidad.
Concentrate Brisia... Sea de verdad o solo un personaje, un niño depende de esté disparo, coloco la flecha arreglada en el arco, estiro la cuerda y preparo mi punteria, solo me toma unos segundos y con toda seguridad suelto la cuerda, la flecha termina penetrando la piel del hombre murciélago por el estómago, da un fuerte grito mientras la cuerda me levanta en el aire, tirando de mi por la cintura, me sostengo debido ha los bruscos movimientos del monstruo, en uno de esas sacudidas consigo subirme ha su espalda, no se cómo se me ocurrió pero en mi mano sostengo otra flecha qué agarro de mi carcaj y lo apuñalo tres veces y con fuerza, provocando heridas profundas en su piel.
Cómo es posible qué la espada no haya conseguido herirlo pero mis flechas si, apesar de la sangre qué cubre la punta de la flecha me consigo dar cuenta de que es una especie de piedra con un raro brillo, no debo pensar en eso ahora, debo concentrarme en lo que tengo qué hacer primero.
Mi flecha termina penetrando la piel en el cuello del hombre murciélago, mi ropa de la parte de las mangas se manchan de sangre, pero lo he logrado, su cuerpo se inclina hacía abajo y sus alas dejan de moverse, creo que le he quitado la vida, rápidamente desato el nudo de la cuerda en mi cintura y salto en cuanto veo que el niño es soltado, el grita entre llantos mientras me abraza con desesperación, veo debajo de nosotros una carreta llena de paja, caemos sobre ellos sin ninguna herida, levanto la mirada para ver que el monstruo impacta contra el techo de una casa, su estómago sea abierto y la sangre corre por el techo, sin duda ha perdido la vida, con mucho cuidado llevo al niño abajo de la carreta.

Niño: Gracias... Señorita.

Brisia: Soy Brisia, no tienes nada que agradecer, solo hazme el favor de volver con tu madre te debe estar esperando.

Hombre: Alto ahí!!!

¿En qué momento?, comó es que ellos llegaron aquí, los caballeros que estaban en el bosque, me están rodeando, uno de ellos le dice al niño que se vaya, el pequeño me dedica una última mirada antes de echarse ha correr, ¿cómo es que dieron conmigo?, no se supone que ellos están buscando ha la Cazadora De...

Líder: Por fin te hemos localizado, Cazadora De Monstruos.