¿Cuánto duraré? [M]

2.2K 299 79
                                    

Hola gente!

Ando un poco ocupada estos días y no podré escribir mucho. Así que sorry, decidí cortar este cap. El otro POV viene mañana :D

______________________________________

Can POV

Seguía manoseando y besando a mi novio. No estaba seguro de poder hacerlo. Pero quizás con su permiso, sí. Me siento capaz, ahora que apagué la luz: sé que puedo hacerlo. Pero otra cosa es... Hacerle a alguien más lo que me hicieron a mí.

- Voy a empezar, amor ¿Puedo? -Asintió.

Mierda Tin, no. NECESITO que me des tu autorización completa, no quiero sentir que estoy abusando de tí...

- Lo siento, necesito escucharlo. -me detuve por completo-. Necesito que me digas que tengo tu permiso.
- Tines mi permiso, Can. Comienza.

Respiré, eso se sentía mejor.
Estaba pensando cómo hacer para que no le duela tanto, para distraerlo y para que disfrute.

De pronto vi que movía sus manos. Me dio ternura.

- Voy a soltarte. -le comuniqué- pero prométeme que solo tocarás mi torso.
- Lo juro, bebé.

Quizás, si lo engaño un poco... Tomé la bolsa con los preservativos y el lubricante. Vertí un poco en una de mis manos y moví mis dedos para que se esparciera bien. Acerqué mi mano limpia (es un decir, porque ya había manoseado su cuerpo al derecho y al revés).

- Chúpalos.

Tin fue muy obediente y comenzó a chupar mis dedos. Mientras tanto con mi mano bañada en lubricante, me iba acercando a su cuevita. Demonios, creo que me está gustando demasiado. Siento mucha adrenalina y emoción.

No le costó tanto como pensaba, pero no es como mi cuevita; me cuesta entrar. Esta es la cuevita de Pie Grande y no recibe visitas.

- Muy bien, amor. Lo vas haciendo muy buen.

Quité mis dedos y lo besé. Mejoró, podía mover mi dedo con más libertad.

- ¿Vamos por otro?
- ¿O-otro? ¿Cuántos piensas meter? -se escuchaba más extrañado que asustado.
- Amor, esto -enterré mi dedo lo más profundo que pude y amé el sonido que hizo- es sólo uno.
- ¿Uno?
- Los deditos de Can son más cortos que los de Tin. -pronuncié con la voz más inocente que pude-. Y Cancito no se queja... -Él respiró hondo.
- Vamos, pon otro más. -Sonó decidió.

Yo reí y lo besé. Quité el dedo que tenía dentro de él y Tin profirió un quejido. Volví a embadurnar mi mano en lubricante y sin previo aviso, acaricié un poco a junior. Y comencé mi segunda expedición.

- Te prometo que va a ir mejorando. -le dije al tiempo que desacomodaba su cabello con ternura y lo besé en la frente.

Lo besé con suavidad y dulzura por su rostro. Y él acarició el mio. Me separé.

- ¿Me vas a hacer el amor? -preguntó.
- Lo estamos haciendo. -le corregí. Ambos sonreímos.
-Te amo, Cantaloupe.
- Y yo a tí, Tin.

Volvimos a besarnos, pero esta vez, con más pasión. Fui bajando lentamente por su cuello y comencé a lamer todo su torso. A esta hora, ya me sentía mucho más osado. Lo lamía como si estuviese bañado en Nutella. Mis dos dedos no dejaban de moverse y mi otra mano estaba en junior. Tin jadeaba demasiado y gemía ocasionalmente. No se ha quejado, así que asumo que todo es placentero... Lo que me lleva a pensar que si se viene antes de tiempo... la sobre-estimulación no es linda. Sería mejor que se viniera ahora.

- Amor ¿Quieres venirte? Va a ser mejor ahora.

Tomé su cadena (la que tiene colgado nuestro anillo) y lo jalé. Él se apoyó en sus codos y se levantó.

- Can se va a portar muy bien contigo, si te vienes ahora. -Traté de sonar sensual.

Me encanta cuando Tin me embiste y lo hacemos duro y rico... pero tiene su encanto, el ser dominante.

- De acuerdo. - Sonreí y me relamí.

Solté la cadena para volver manos a la obra. Acompasé el movimiento de ambas manos y me arrepentí de haber apagado la luz. Sus sonidos y la curvatura de su cuerpo... mierda... tendría que haberlo filmado en HD. Normalmente no estoy en condiciones o posición... como para disfrutar y admirar cuando tiene su orgasmo. Pero hoy se me dio y no lo filmé.

- Eres el mejor, Tin, el mejor. -Me acerqué y lo besé en la frente.

Tomé una toallita y lo limpié. Las habíamos dejado en el estante del baño y las llevé al cuarto.

Me siento bien. Cuando estaba en el baño solo pensaba en volver y seguir jugando con el cuerpazo de dios griego de mi novio. No me siento tímido, ni nervioso: tengo ganas de esto. Solo me pregunto: ¿Cuánto duraré? ¿Me atreveré a más?

Adorablemente Estúpido [ Terminado]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora