Peter: -parado en la puerta del consultorio de Rochi- ¿Qué haces?
Rochi: -levanto la mirada y sonrió ligeramente- Cierta persona me volvió adicta a los juegos...
Peter: -se sentó frente a ella- ¿Mi hermano también jugaba con vos? –Rochi lo miro, levantando una ceja- De juegos, de celular, Wii, no que... te engañaba.
Rochi: -sonrió, negando con la cabeza- No, él y yo no jugábamos con estas cosas....
Peter: -la miro, queriendo reírse-Tenían otro tipo de juegos... -Rochi lo golpeo para que se callara, Peter solo rio, mientras ella bajo la mirada a su celular nuevamente- ¿No lo extrañas?
Rochi: -moviendo sus dedos- Tanto como vos a Lali...
Peter: ¿Y no pensas hacer nada para evitar que se casen?
Rochi: ¿Vos estas haciendo algo?
Peter: -la miro, seriamente- ¿Vas a seguir evitando mis preguntas?
Rochi: -perdió el juego y levantó la mirada- ¿Cande te ha estado metiendo ideas en la cabeza?
Peter: ¿Eh? –Confundido-
Rochi: Cande viene diciéndome, hace meses... -prolongando la última palabra- Que haga algo para volver con Pablo, el problema era que yo tenía algo con alguien más...
Peter: Ah bue... -la miro, seriamente-
Rochi: ¿Me vas a decir que después de que terminaste con Lali, no tuviste nada con nadie? –Mirándolo, sin creer la pregunta que estaba haciendo-
Peter: Yo... -se detuvo con la boca abierta un momento- Yo era así antes, no tuve nada con nadie... eh, es diferente, todo era pasajero...
Rochi: -lo miro seriamente- No me saltes con, es diferente porque soy hombre, eh. –Peter dejo de mirarla, un poco molesto- Si no te molesta, tengo citas, así que en cualquier momento van a llegar mis pacientes...
Peter: -la miro, enlazando sus manos- Doctora... -Rochi lo miro sonriendo- ¿Tiene una cura para las heridas de amor?
Rochi: -negó con la cabeza- Busque usted mismo su propia cura. –Peter, desanimado, se levanto del asiento y al salir, un paciente entro-
Euge estaba arreglando su departamento, poniendo flores en las ventanas que tenía todo el lugar. Mientras cantaba esa única canción que había escrito por completo. Estaba un poco preocupada, porque ya que no se dedicaba a su trabajo anterior, por casi varios meses, el dinero que tenía ya se estaba agotando, así que para tranquilizarse, para dejar de pensar en eso, empezó a arreglar todo, quería cambiar todo.
Nico ya tenía una llave para entrar, porque Euge lo había agregado a su juego de llaves. Al llevar olio ese rico aroma que olía cada vez que entraba, al abrir sus ojos vio los cambios que Euge había hecho y entrando más empezó a escuchar lo que estaba cantando. Ya sabía unas cuentas letras de la canción, así que empezó a sonreír mientras la buscaba.
Euge se asusto cuando sintió que alguien la cargo por atrás, interrumpiendo su canto. Hasta que Nico la sentó en el sillón. Ella estaba confundida por su forma de llevarla, normalmente esperaba que él la siguiera o que fuera cuando se le ocurriese. Nico se sentó al lado de ella, mirándola, sin decir nada; Euge estaba totalmente confundida, Nico sonrió al verla paralizada y confundida; y Cuando Euge se animo a hablar, Nico la beso.
Euge: -abrió sus ojos poco a poco, después del largo beso- Hola Nic.
Nico: -mirándola, sonrió- Hola Eu... -Apoyo su cara en el sillón, sin dejar de mirarla-
Euge: ¿Puedo preguntar por qué...?
Nico: No.
Euge: -lo miro- ¿Por qué no? Estoy un poco confundida...
Nico: -mirándola- Porque no tengo una palabra definida para explicarte lo que me haces sentir. –Euge lo miro sonriendo lentamente- Bueno, sí lo sé, pero quiero dejar un poco de misterio.
Euge: -sin dejar de sonreír- Eso no es justo, yo también tengo derecho a saberlo.
Nico: -negó con la cabeza- Lo que es injusto, es que aun no haya comido... hablemos con propiedad. –Euge lo miro levantando una ceja y rio- Aunque ahora siento que mi panza esta llena de cierta sustancia extraña, así que mucha hambre no tengo... -Ambos se miraron un momento en silencio, pero Euge intento levantarse para servir la comida-
Euge: -Nico volvió a sentarla, más cerca de él- Voy a... -Nico volvió a besarla sin decir nada- Vas a... -pico- Hablar vos... -pico- En cualquier momento.
Nico: -la miro, tocándole el rostro con una mano- ¿Comemos?
Euge: -lo miro, muy cerca- Sos negador, vos... -Nico le dio un pico más- Bueno, vamos... -se levanto del sillón, junto con Nico; y él la abrazo por la espalda en todo el camino de la sala al comedor-
Nico: -le hablo al oído- Creo que siento algo más que simplemente quererte... -Euge sonrió sin girar a mirarlo- Así que el fin de semana, no vamos a comer aquí, ¿ok?
Euge: -giro para mirarlo- Ah... te aburriste de mi comida, es eso.
Nico: Noooo... -Negó con la cabeza- No es eso, no... -Euge lo miro, confundida y un poco triste- No te voy decir nada, solo que vamos a salir, punto.
