Rochi: - Empezó a sonreír. - ¿Agus?
Agus: No, Ignacio. – Rochi se quedó callada, asustada. – Obvio que Agus, che. – Se rio al imaginar el rostro de su prima.
Rochi: No digas esas cosas, Agus... - Agus volvió a reírse, pero no con tanta intensidad. - ¿Cómo estás? ¿Ya mucho mejor?
Agus: Y, emocionalmente creo que sí... - Pensativo. – No sé...
Rochi: - Apoyada en el borde de la puerta, se confundió. - ¿Cómo que no sabes? ¿Necesitas algo?
Agus: - Incómodo. – Trabajo...
Rochi: Oh, ¿no te lo quieren dar o qué...?
Agus: Un poco de eso... - Ambos se quedaron en silencio un largo tiempo. - ¿Cuándo vas a venir a visitarnos por aquí o tenemos que ir hasta allá, eh?
Rochi: - Sonrió. – Y yo no puedo... tengo a mi nena, ¿sabes?
Agus: ¿Una hija, ya? – Sorprendido. – Pensé que aun podía llegar para el divorcio, che. – Rochi entrecerró los ojos. – Bueno. Supongo que tendré que ir yo...
Rochi: ¿Solo por mí? – Preguntó dudando de eso.
Agus: Ya te dije que quiero trabajo; tan importante como querer ir a verte, bueno sí...
Rochi: Agus... - Dijo incómoda.
Agus: Ok, me cayó. – Suspiro. – Supongo que ahora vivís en otro lugar, ¿no? Una súper mansión.
Rochi: Estoy trabajando en el mismo lugar si queres verme...
Agus: Está bien. Te entiendo. Nos veremos pronto. – Colgó antes de escuchar la despedida de Rochi.
Vale: ¡Mami!
Rochi: - Reaccionó después de colgar el celular. - ¿Qué pasa, pequeña?
Vale: - Suspiró. – Tengo hambre...
Ramiro: Yo también... - Agregó.
Rochi: - Sonrió, soltando sus brazos y relajando su cuerpo. – Supongo que deberíamos comer...
Gas: Yo sólo quiero ver a Cande...
Euge: - Confundida. - ¿A cuál? A la que podes ver es a la gemela...
Gas: - La miro, serio. – A la que no puedo ver.
Pablo: ¿Y qué pasa si vuelves a ver a...Estefanía?
Gas: - Se encogió de hombros. – No creo que vuelva a verla, igual. Supongo que solo fue a ver a su hermana y... no sé.
Euge: ¿Y si, sí la ves? – Gas la volvió a mirar, mientras Euge sonreía. - ¿Qué harías?
Gas: No me voy a enamorar de alguien que no sea...
Euge: ¡Ay, Gas! – Lo miro. – Sos joven para pensar en eso...
Gas: No quiero...
Pablo: Si te pasa, así nomás, no vas a poder negarte de lo que sentís. – Dijo confundiendo más a Gas.
Gas: No la vuelvo a ver y punto. – Se cerraba a pensar en volver a enamorarse.
Rochi llegó junto con los dos niños, para levantar a todos del sofá y llevarlos a comer.
Aunque Gas no quisiera reconocerlo, tenía ganas de que, sea donde sea, esa otra Cande volviera a aparecer en su camino. Pronto o tarde.
Gime: ¿Tenes todo, no? – Preguntó todas las maletas que había equipado.
Nico: - Con cara de dormido, se tocó totalmente. – Sí, creo...
Gime: - Lo miro, siendo obvia. - ¿no te olvidas de algo, que deberías tener en tus manos?
Nico: - Volvió a mirarse. – No.
Gime: - Respiro hondo. – Tu maleta, Nico...
Nico tuvo que ir corriendo hasta el lugar donde pasaban las maletas para recogerlo.
Gime estaba riéndose viendo desde donde estaba, a Nico buscando entre la lista de maletas la suya. Hasta que un abrazo atrás de ella la sorprendió apagando su risa. Sin darse cuenta de que Nico ya había recogido su maleta y regresando hasta ellos lentamente.
Uu: - Abrazando a Gime. – Llegaron más tarde de lo que dijiste.
Gime: - Sonrió, sin soltarse. – No sabía nada del horario, solo te dije lo que sabía.
Uu: - Ayudó a Gime con las maletas, mientras ella giraba para verlo. – Bueno, no importa. Lo bueno es que ya regresaron. – Ambos sonrieron. - ¿Y el distraído?
Nico: ¿Me buscabas? – Ambos se miraron. - ¿Me extrañaste?
Uu: Solo vine por mi...
Nico: - Lo detuvo con la mano. – Aun no estoy acostumbrado, solo deci que sí.
Uu: Obvio que te extrañe, hijo. – Nico sonrió y lo abrazó fuertemente.
Gime: Después de tantos años, supongo que Lali se terminará siendo tu hermanita. – Dijo sonriente.
Nico: Bueno, Mariano se demoró mucho en hablar. Muy lento... - Dijo empezando a caminar, para salir del aeropuerto. Dejando a los dos caminando atrás de él.
Mariano: ¿Te llevamos a tu casa, Nico? – Nico solo asintió sin mirar atrás.
