Daky abrió la puerta de su departamento y se encontró con dos rubios en la puerta, sorprendida los hizo pasar.
Daky: ¿No tenes clases, vos? - Preguntó al pequeño.
Ramiro: Tengo un padre muy bueno. - Dijo sonriente.
Daky: ¿Y eso de que estés hablando bien de él? - Se inclinó hacia él. - ¿Con qué te soborno?
Ramiro: - Lo pensó un momento, antes de hablar. - Con darme una familia feliz. - Daky se quedó mirando al rubio chiquito, sin entender. - Darme una mamá.
Daky: - Se paró derecha, cruzada de brazos, algo sospechosa. - ¿Tu padre no se atreve a hablar?
Gas: Vos al primero que le das atención es a él, no a mí. - Se justificó, poniendo sus manos en los hombros de su hijo, parado atrás de él. Daky se quedó callada porque era cierto. - Queríamos saber si queres almorzar con nosotros.
Daky: - Sonrió levemente. - Bueno, pero con una condición.
Ramiro: ¿Cuál? - Preguntó inmediatamente.
Daky: Qué no se rían. - Ambos la miraron sin entender.
Fue entonces que Daky empezó a atacar a Ramiro con cosquillas, ya que había recordado aquella mañana en que Euge lo alegro de ese modo. Ramiro era muy sensible a las cosquillas y no podía quitarse a Daky de encima, así que le pidió ayuda a su padre, riendo, casi gritando; y Gastón separó a Daky de su hijo, agarrándola de la cintura, para luego echarla en el sofá y empezar a atacar a cosquillas a ella.
Daky se protegía, pero de igual modo Gas era más fuerte que ella y le ganaba. Y luego entró Ramiro y entre los tres terminados con dolor de panza por reírse.
Ramiro: - Echado en el suelo. - Entonces, ¿no vamos a ir? - Preguntó, ya que no habían cumplido con la condición.
Daky: Na, me gusta comer, así que no podría decir que no. - Le dijo sonriendo, tirada abajo de su padre en el sofá; respirando hondo por la larga risa.
Como Ramiro no había ido al colegio, Rochi y Vale fueron acompañando a Euge y Juan. Vale quiso llevar a Juan en su cochecito y lo llevo cantando y con cuidado. Mientras ambas madres caminaban atrás de ellos.
Rochi: Euge... - Euge la miro, siguiendo el paso. - Quería preguntarte algo.
Euge: Sí, decime. - Dijo intrigada.
Rochi: ¿Vos usas test? - Preguntó, palabra por palabra.
Euge: ¿Eh? - Preguntó sin entender.
Rochi: De embarazo... - Dijo en voz baja para que Vale no escuchara.
Euge: ¿Qué? - Preguntó con una sonrisa en el rostro. Rochi la silencio, moviendo sus manos, mientras sonreía. - ¿Por qué me preguntas?
Rochi: - La miro entrecerrando sus ojos. - Porque Pablo tiene nauseas. - Dijo irónica.
Euge: - Se rio con esa idea. - No me refería a eso, che. - Rochi se mordió el labio, sonriendo, rodeando los ojos. - ¿Pensas que estas embarazada?
Rochi: - Volvió a mirarla algo estresante. - No, quiero comprobar que no lo estoy... ¡Ay obvio! - Euge se rio por lo irónica que se podía Rochi.
Euge: - Miro hacia Vale. - ¡Ten cuidado Vale! - Adelanto sus pasos hacia ella. - Dale, chiquita. Yo la subo. - Dijo, cuando tenían que entrar al edificio.
Los cuatro subieron hasta el departamento de Eugenia.
Euge: ¿Podes cuidar a Juan, sí? - Le preguntó a Vale, ya que ambos estaban en la sala.
Vale: Sí, anda tranquila tía, yo lo cuido. - Dijo sonriente.
Euge: ¿Tía? - Se puso a pensar los lazos de sangre en ese momento. - Ay, ¿de cariño? - Dijo tierna.
Vale: No, por Ramiro. - Sonrío y volvió la mirada a Juan, haciéndolo jugar con los juguetes que tenía.
Euge miro a Rochi porque ella era celosa, hasta con su sobrino. Y la mamá de Vale sonrió, negando con la cabeza.
Ambas subieron al cuarto de Euge, y conversaron un momento, mientras Suarez buscaba el test.
Euge: ¿Por qué pensas que estás embarazada? - Preguntó.
Rochi: Bueno, en realidad, hace dos meses que lo pienso... - Confesó.
Euge: - Se sentó en la cama junto a su amiga, con el test en la mano. - ¿Qué?
Rochi: Ya sé, ya sé. - Dijo algo avergonzada. - Pasa que yo fui irregular de chica, adolescente, bueno. - Euge escuchaba atentamente. - Y bueno, a veces no me venía un mes o dos...
Euge: ¿Tanto? - Preguntó asombrada. Rochi asintió. - ¿Y luego se te normalizo?
Rochi: Y, sí... - No entró en detalles. - Y, como ya no me cuido, al principio sí, desde que me case con Pablo, porque bueno, no quería que él se preocupe por un gasto más.
Euge: Nunca los vi mal económicamente. - Dijo confundida.
Rochi: Igual. - Prosiguió. - Es más, ahora que yo no tengo trabajo, me preocupa.
Euge: - Tomo las manos de su amiga. - No te preocupes. - Intentó tranquilizarla. - Un hombre cuando ama, hace todo para que su familia este bien. Incluso no dormir. - Admitió, ya que recordó las veces que Nico no dormía por darle gusto a sus antojos. - Pero no es por la simple obligación, cuando son verdaderos hombres, se ponen la responsabilidad al hombro con la satisfacción d luego ver a los que aman bien. - Rochi sonrió. - ¿Acaso no está bien Vale? ¿No está con prácticamente dos trabajos?
Rochi: No quiero que se canse. - Dijo algo triste.
Euge: Con la ayuda de mi hermano, no lo estará. Yo no me preocuparía mucho, si mira, con mi pequeño trabajo temporal y el de Nico estamos bien. ¡Imagínate vos! - Dijo tratando de hacerla reaccionar. - Una familia no es un gasto, es una inversión; que te trae como ganancias, felicidad.
Rochi: - Suspiró. - Ok, vos sí que sos buena en esto.
Euge: - Sonrío levemente. - Debe ser mi deseo de tener mi familia feliz. - Rochi la brazo fuertemente, habían tenido una larga charla sobre el pasado de Euge un día y la entendía.
Rochi: ¿Me enseñas a usar esto? - Preguntó confundida.
