CAPÍTULO 26

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A Lali le pareció sentir que su corazón estaba por salirse de su boca. Se quedo en silencio, recordando lo que había pasado con su novio anterior, había escuchado esas mismas palabras varias veces, en varias ocasiones, con diferentes intenciones.

Lali: -nerviosa- ¿Qué...? ¿Qué me Queres preguntar?
Peter: -suspiro, echándose con la mirada al cielo, con la cabeza sobre sus brazos- En realidad tengo muchas preguntas para hacerte, porque no te conozco casi nada.
Lali: Ah... -Se sintió algo triste, confundida; ella esperaba escuchar una pregunta en especial- ¿Qué es lo que Queres saber?
Peter: -giro su mirada hacía ella- ¿Podes quedarte despierta toda la noche? –Lali lo miro, siéndole rara su primera pregunta- Te lo pregunto, porque creo que con las preguntas que quiero hacerte, vamos a estar hablando toda la noche. –Rio un poco al ver la cara extrañada de Lali-
Lali: -rio un poco, por la risa contagiosa de Pitt- Ya te dije que no soy de dormir mucho, así que puedo quedarme despierta tranquilamente.

Simón bostezo fuertemente, distrayendo la mirada de Lali y Peter. El perro se quedo junto a ellos, con los ojos cerrados, porque ya era su hora de dormir; estaba cansado por haber correteado a varios invitados de la fiesta, por tratar de impedir que Nico entrara en la cocina para ver a Mery, entre otras cosas.
Como Peter le había dicho a Lali, Simón era inteligente. Por el tiempo que vivía ahí, sabía perfectamente lo que sus amos querían, sentían... el perro engreído de Pablo, sentía a Peter feliz al estar cerca de Lali, pero a la vez sentía sus hormonas revoloteando. También podía sentir el nerviosismo de Lali, así que decidió quedarse por si a su amo se le ocurría hacer algo que ella aun no estaba lista.

Cande: -se sentó recostando su espalda en la cama, al lado de Gas- ¿La vas a llamar?
Gas: -suspiro, pensando que hacer en ese momento- No sé. No sé qué hacer. Debería alegrarme volver a ver a mi hermana, pero va a intervenir en varias cosas. Lo sé. La conozco. No pensé que vendría, no estaba en mis planes.
Cande: -confundida- ¿Planes de qué?
Gas: -bajo la mirada al piso y recogió su ropa- Más adelante te lo contaré, si puedo.
Cande: Gasti... -Gas la miro mientras se ponía la remera- Vos y yo, ¿qué onda?
Gas: -termino de ponerse la remera y bajo sus brazos, sobre sus piernas- Yo te quiero mucho, la he pasado de maravilla, pero...
Cande: -estresándose- Pero, ¿Qué?
Gas: -la miro, recordando ciertas cosas, con una ligera tristeza en su mirada- Las personas no cambian.

Cande lo miro sin decir otra palabra. Gas se sentó en el borde de la cama, dándole la espalda a Cande, terminando de vestirse. Ella ya estaba vestida, solo le faltaba arreglar un poco su cabello, pera ya no tenía ánimos de nada. Y el celular de Gas volvió a sonar.

Cande: -descargando su molestia- ¡Contesta rápido, antes que lo tire por la ventana! ¡Ya te dije que odio ese sonido! –Gas sabía que su enojo no era por el aparato, solo lo uso como escusa, pero no le dijo nada-

Ambos estaban mirando las pocas estrellas que se veían en el firmamento.

Peter: ¿Por qué no me Queres decir cuantos años tenes? ¿Sos muy vieja? –Rio-
Lali: Siguiente pregunta...
Peter: Contéstame.
Lali: -Suspiro- 20.
Peter: Sos muy tiernita.
Lali: Pitt...
Peter: Ya, ok. Te toca.
Lali: -mirando al piso, del lado opuesto a donde estaba Peter- ¿Cuántas novias has tenido?
Peter: -giro su mirada a ella- ¿Cuántas novias? –Lali asintió sin mirarlo- La verdad, solo una.
Lali: -lo miro, rápidamente- ¿Una? Eso no te lo creo.
Peter: -rio ante su aclaración- De verdad, solo he tenido una novia. Las demás... no llegaron a ser oficialmente mis novias. –Lali hubiera preferido no hacer esa pregunta- ¿Vos? ¿Cuántos novios has tenido?
Lali: -suspiro- Tres.
Peter: ¿Tres? –Lali lo miro asintiendo- Yo pensé que solo dos, así yo era el tercero. –Lali levanto una ceja- Viste que la tercera es la vencida. –Lali quiso reírse pero lo dejo solo en una sonrisa-
Lali: Vos no sos mi novio. –Peter iba a hablar, pero Lali se adelanto a su pregunta- ¿La amaste?
Peter: -volvió su mirada al cielo- Prefiero la clase de preguntas de, ¿Cuál es tu color favorito?
Lali: -se dio cuenta lo mal que le ponía hablar sobre ella- No tengo un color favorito.
Peter: -Pensativo- Podría ser verde, ¿no? ¿Qué opinas?
Lali: ¿Por qué verde?
Peter: -apoyo su cabeza en el césped, al mismo tiempo que ella, mirándose entre ellos- Por el color de mis ojos.

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