CAP 76

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Lali.-

Esa mañana desperté más temprano que nunca; bueno, casi todos en casa éramos así. A veces era él, a veces era yo, a veces uno de los niños; pero en días importantes el sueño se nos iba aunque la noche anterior no hayamos podido dormir temprano. Aunque digamos que esta vez superé el record, eran las 5 de la mañana y ya no podía estar dentro de la cama.
Me quedé un momento en la cama, viendo a Pitt durmiendo. Tenía un poquito de luz entrando por la ventana ese día y lo agradecí mucho, era lindo verlo echado en la cama, boca abajo, casi abrazando a la almohada. A veces tenía que limpiarle un poco la baba que se le caía, me reía en silencio, nunca llegué a decirle eso porque él no hubiera querido que lo viera así.
En esos momentos en que todo era silencio, mi cabeza empezaba a recordar los momentos que había vivido todos estos años. Desde los tiempos más lejanos hasta los más cercanos. Recordé cuando fui por primera vez al cumpleaños de Pitt, cuando cumplió 24.

"Lali: -nerviosa- ¿Qué...? ¿Qué me queres preguntar?
Peter: -suspiro, echándose con la mirada al cielo, con la cabeza sobre sus brazos- En realidad tengo muchas preguntas para hacerte, porque no te conozco casi nada.
Lali: Ah... -Se sintió algo triste, confundida; ella esperaba escuchar una pregunta en especial- ¿Qué es lo que queres saber?
Peter: -giro su mirada hacía ella- ¿Podes quedarte despierta toda la noche? –Lali lo miro, siéndole rara su primera pregunta- Te lo pregunto, porque creo que con las preguntas que quiero hacerte, vamos a estar hablando toda la noche. –Rio un poco al ver la cara extrañada de Lali-
Lali: -rio un poco, por la risa contagiosa de Pitt- Ya te dije que no soy de dormir mucho, así que puedo quedarme despierta tranquilamente."

Por mucho tiempo fue así, podía dormir pocas horas y estar despierta para el día siguiente, sin estar pesada por todos los lugares que fuera, con ganas de tirarme en cualquier rincón que encontrara. Pero la vida me cambió, hubo un tiempo en que todo lo que quería era tener una cama portátil y echarme en cada lugar que iba; o simplemente poder tener siestas cada 2 horas. Pero bueno, basta de estar tan echada y sin hacer nada en un día que tengo miles de cosas que hacer.
Me levantó de la cama, con mucho silencio, dejando a Peter dormir tranquilamente. Un buen desayuno es lo que necesito en este momento.

Peter.-

Un secreto que Lali tiene conmigo es el mismo que yo tengo con ella. Yo tenía el don de poder estar despierto pero parecer dormido. Había sentido su mano en mi cara cuando paso por mi boca a secarme un poco. ¡Es algo que detesto!, pero no puedo controlarlo. Espero no parecer un asco para ella cuando me ve así. Y un poco será por lo baboso que me pongo cuando estoy con ella.
Era como una rutina estar despiertos en días así, pero yo no tenía la misma vitalidad que Lali aún tenía. Era el motor de todos, ella sacaba las energías de dónde sea y podía estar despierta desde tan temprano. A mí me daba pereza estar fuera de la cama tan temprano y menos si era un día no laborable. Con los años aprendí a quedarme rodeado del olor cálido que dejaba en la cama sin tener que estar ella presencialmente. Además, cuando saliera del cuarto iba a estar con un hambre que preferí que fuera a desayunar primero.
Poco a poco abrí mis ojos cuando sentí que ya había pasado como una hora desde que Lali había salido de la cama, el sol estaba más fuerte, cada día se ponía más espantoso tan temprano. Era lindo el verano, pero para dormir no ayudaba en nada.
Me levanté lentamente, quedándome sentado en la cama un momento, despeinándome más el cabello de lo que ya estaba. Siempre me gustaba que cada vez que Lali me veía despeinado empezara a arreglármelo. Siempre tratando de calmarme cuando mi fuerza de voluntad ya no era suficiente. Recuerdo la vez que me enteré que estaba embarazada y casi tiro la casa para debajo de tanto movimiento.

"Peter: O sea, que, vos, yo, bebé. – Empezó a hablar sin sentido.
Lali: Sí mi amor, estoy embarazada, aunque no sé si es niño, niña, no me hice nada más que la prueba de sangre. – Dijo sonriendo.
Peter: - Abrazó fuerte a Lali, volviéndola a tirar en el sofá, dándole besos en toda la cara, sonriendo. – Es la mejor noticia que me podías dar. – Lali lo miraba sonriendo de oreja a oreja. – Ahora, vamos al hospital y te haces todo lo que tenes que hacer. Si tenes que tomar algo, lo tomas. – Lali quería hablar, pero la alegría de Peter era tanta que ni se daba cuenta. – Hay que buscar nombre de niño y niña, ¿viste? – La miro. – No que sea común porque es como que en el colegio tienen el mismo nombre y no da.
Lali: Pitt... - Quiso hablar, aun sonriendo, mientras escuchaba a Peter.
Peter: Ahora, tampoco que sea un nombre como para que le hagan bullying eh. – La miro. – Que sea un nene, creo que estaría bueno. No queres verme tirando palos a todos lados cuando me ponga sobre protector con mi hija. – Hablaba todo tan rápido que Lali apenas podía entender.
Lali: Para... - Riéndose.
Peter: Voy a ser papá. – Empezó a moverse sobre ella en el sofá, como si estuviera saltando. Y luego volvió a pensar y entrar en trance hablando solo y rápido. – Aunque quiero una chiquita que sea como vos, así de dulcecita, que la enternece todo y que pegue a todo el mundo. – Lali se rio fuerte. – Va a estar bueno, porque hay no tendría que andar con un rifle por todos lados. La altura sí que salga a mí, y más alta. Tipo un minón y que no haya hombre para su altura, se queda a vivir todo el tiempo con nosotros.
Lali: La vas a dejar solterona, cállate. – Decía riéndose.
Peter: Ahora, mira si quiero que sean dos. Un flash. – Abrió sus ojos enormes. – Me sentiría más macho de lo que soy, dos tiros en una, ¿estaría bueno, no? Porque viene Nico y me sale con Juan, Gas solo tiene a Ramiro, ahora Pablo que no sé si es niño o niña. Llego yo y tengo dos, les re gano. – La miro. - ¿Te dije que no me gusta perder?
Lali: Contrólate. – Seguía riéndose. Peter se rio un poco por lo contagiosa que era la risa de Lali, sonriendo.
Peter: - Se levantó de su encima, empezando a ver toda la casa. - ¿Estaría bueno este lugar para vivir, siempre, no? – Lali se encogió de hombros. – Imagínate los cumpleaños en el mar, está buenísimo, voy a ver como arreglo todo esto. – Dijo pensativo.
Lali: - Se levantó del sofá y lo abrazó fuerte, con sus brazos por la cintura de Peter. – Yo también estoy muy feliz de que tengamos un hijo.
Peter: - La abrazó fuerte, rodeándola con los brazos. – Y no te imaginas lo feliz que me hace a mí.
Lali: - Levantó su rostro, mirándolo. – Te amo. – Hizo trompita con sus labios para que la bese.
Peter: Yo te amo más, más, mucho más.
Lali: - Apartó su rostro de él, antes que la bese. – Yo te amo más, más y más.
Peter: Podemos estar todo el día así si queres, vos sabes que yo te amo más. – Lali iba a contradecirlo, pero él la cargó como cuando los recién casados llegan a casa. Ella tuvo que sostenerse rodeando sus brazos por el cuello de él. – Te amo demasiado.
Lali: - Rozando sus labios, sonriendo. – Yo te amo más que eso.
Peter: Después seguimos. – Dijo antes de besarla, sonriendo, subiendo lentamente por las escaleras al piso donde había cuartos."

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