Capítulo 77.- Probar su inocencia

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Al darse cuenta de que el asunto estaba a punto de salirse de control, Christopher decidió ponerle fin.

Llevó a Janet aparte y dijo en voz baja: "¿Qué te parece esto? Yo pagaré por la billetera. El Grupo Larson valora su reputación y si se enteran, probablemente te despedirán. Además, realmente encontraron la billetera en tu bolsillo y si llaman a la policía, es posible que termines en la cárcel".

"Chris, yo no tomé esa billetera. Entonces, si acepto pagar diez veces su precio, será como admitir que soy culpable, ¿cierto?". Janet habló tranquila. En su voz no había rastros de pánico.

Elaine estaba a un costado, escuchando a escondidas. Pensó que Janet era demasiado orgullosa como para aceptar el dinero de Christopher. Pero era inútil. ¿Pensaba que la policía probaría su inocencia?

De todos modos, la billetera había sido encontrada en el bolsillo de Janet y las cámaras de seguridad de la tienda no habían captado lo que realmente había sucedido. Eso significaba que, por defecto, Janet sería la ladrona.

Incapaz de controlar su emoción, Elaine le insistió al gerente para que llamara a la policía. "Esta ladrona no puede pagarle. Está perdiendo el tiempo si no llama a la policía ahora mismo".

El gerente de la tienda estuvo de acuerdo. No mucho tiempo después, entraron dos policías uniformados.

Elaine inmediatamente corrió hacia ellos, arrastrando a Janet detrás de ella. "Señores, esta mujer robó en la tienda, pero no quiere admitirlo".

"Por favor, esperen. Les pido que comprueben la filmación de la cámara de seguridad. La evidencia demostrará que no robé la billetera, sino que me tendieron una trampa", dijo Janet con una sonrisa confiada.

Elaine entrecerró los ojos y se rio como si hubiera escuchado un chiste gracioso. "¿A qué estás jugando, Janet? ¿No acabamos de comprobar las imágenes de seguridad de la tienda?".

"No estoy hablando de la cámara de seguridad de esta tienda, sino de las cámaras que están en el pasillo del centro comercial". Janet se dio la vuelta y señaló las cámaras de seguridad en el corredor justo afuera de la tienda.

El frente de la tienda era de vidrio para atraer más clientes, por lo que las cámaras de seguridad en el corredor podían registrar con facilidad lo que sucedía dentro de la tienda a través de los vidrios exteriores.

"Por favor, revisen las cámaras de seguridad del centro comercial. Las imágenes desde ese ángulo deberían poder probar que no robé nada", dijo Janet muy tranquila y con una pequeña sonrisa asomando en sus labios.

"¡No la escuchen! ¡Probablemente solo esté buscando hacer tiempo mientras planea cómo huir cuando no la estén mirando!". Elaine entró en pánico al escuchar la tranquila explicación de Janet. Su rostro se puso pálido mientras intentaba convencer a los policías.

Después de todo, ella había sido quien deslizó la billetera en el bolsillo de Janet, aprovechando el punto ciego de la cámara de seguridad de la tienda. Sin embargo, no tuvo en cuenta las cámaras de seguridad del centro comercial. Si lo que había hecho hubiera sido capturado por esas cámaras, estaría en problemas.

"Elaine, solo le pedí a la policía que revise las cámaras de seguridad del centro comercial. ¿Por qué estás tan asustada?". Janet la miró con falsa empatía, aunque en sus ojos había un brillo peligroso.

Elaine estaba nerviosa, pero se obligó a mantener la calma. "Si la ladrona no tiene miedo, ¿por qué debería tenerlo yo?", dijo.

Como se solicitó, la policía revisó de inmediato las imágenes de seguridad del centro comercial.

Todos contuvieron la respiración mientras miraban la pantalla de la computadora. Se preguntaban qué juego se traía Janet entre manos. Después de todo, habían encontrado la billetera en su bolsillo.

Aunque las imágenes estaban un poco pixeladas, se veía muy claro que Elaine se había parado junto a Janet y había sacado con disimulo la billetera del estante y la había colocado en el bolsillo de Janet.

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