La Novia Más Afortunada.

Capítulo 177. - Tu relación con Brandon

"¿Qué podría ocultarte?". Ethan se encogió de hombros mientras continuaba poniendo los platos en el fregadero. Aunque parecía tranquilo, su corazón latía acelerado.

Janet era una mujer inteligente, y ocultarle la verdad no era fácil.

El joven esperaba que ella dejara de analizar todo demasiado y solo lo dejara ayudarla.

"Quiero decir, ¿fuiste a visitar a Brandon otra vez? De lo contrario, ¿por qué me volvería a ayudar?". Janet frunció el ceño y estudió su rostro. Algo le resultaba sospechoso.

¿Por qué Brandon encontraría al grupo de estafadores que habían engañado a Hannah y lo habría erradicado sin obtener ningún detalle de Janet?

Ella no dudaba de la capacidad de Brandon, pero estaba confundida acerca de sus intenciones.

Ethan sacó una lata de cerveza de la nevera, la abrió y la tomó toda. Luego se apoyó contra la nevera y miró a Janet de soslayo. "Brandon no es como nosotros. La gente como él siempre tiene todo bajo control. Es muy difícil que podamos saber qué piensa. Quizás te considera un elemento valioso para la empresa y por eso es tan amistoso contigo. Ayudarte ahora puede ser una inversión que le dé muchos beneficios en el futuro".

Janet tomó lo que dijo con pinzas. La expresión de Ethan era indescifrable y no podía decir si le estaba diciendo la verdad o escondía algo.

Abrió la boca y la volvió a cerrar sin saber qué decir. Ethan se dio cuenta de que todavía dudaba de él. Suspiró y se sentó al lado de la joven. "Mira, creo que lo estás pensando demasiado. Tu jefe tiene en buen concepto de ti, no creo que haya nada oculto. Tienes que estar orgullosa de ti misma".

"Solo quiero saber la verdad, Ethan. Dímelo. No me enojaré contigo incluso si te encuentras con Brandon sin que yo lo sepa". Janet lo agarró del brazo y le clavó la vista.

Ethan siempre había sido un hombre muy decidido, incluso Garret lo consideraba un hombre sofisticado. Nadie en el mundo de los negocios podía saber lo que pensaba, pero sus juicios siempre eran acertados.

En ese momento, Ethan sabía lo que estaba pensando Janet.

"Solo te estás imaginando cosas. No me resultó fácil verlo la última vez. Después de todo, es el presidente del Grupo Larson. No puedo encontrarme con él cuando yo quiero". Ethan le masajeó la espalda y luego bajó con suavidad la mano para masajear su cintura. "No lo pienses demasiado". Se acercó más y le susurró al oído: "Este problema está resuelto. Deberías sentirte feliz. No tiene sentido que te sigas preocupando. ¿Quieres descansar un rato ahora? Entretanto, lavaré los platos, cariño".

Janet apretó los labios y se quedó en silencio.

Ethan sonaba tan amable y dulce en este momento. Le gustaba la forma en que la trataba ahora. Después de todo, se sentía atraída por él.

"Está bien, vete a lavar los platos ahora".

El joven respiró aliviado, le dio un beso en el borde de los labios y se fue a la cocina.

Janet estaba un poco cansada porque no había logrado dormir bien desde que se mudó a la habitación de Ethan. Estiró su espalda dolorida y miró a Ethan, que estaba ocupado en la cocina. Una sonrisa involuntaria apareció en sus labios.

Ethan era encantador y, además, no le molestaba hacer las tareas del hogar. Cualquier chica se enamoraría de él.

La sonrisa en el rostro de Janet se congeló cuando una idea apareció en su mente.

Ethan sintió su mirada ardiente y sonrió sin levantar la vista. "¿Estás supervisando si estoy lavando bien los platos?".

Sin embargo, Janet no respondió. Ethan frunció el ceño y miró hacia atrás.

Janet estaba de pie en la puerta de la cocina y lo miraba fijo.

"¿Ethan? ¿Cuál es tu relación con Brandon?".