Capítulo 105.- Eres Única

1K 58 8
                                    

Ethan no esperaba escuchar esa impactante información. Mientras la procesaba, apretó los dientes.

El hecho de que Janet se casara con él a cambio de dinero lo molestaba y le rompía el corazón.

Pero entonces recordó que él accedió al compromiso por ser el último deseo de su madre. ¿Qué lo diferenciaba de Janet? Era injusto juzgarla.

Aunque él puso sus emociones bajo llave para mantener la compostura, su mente estaba en una montaña rusa.

'¿Por qué Janet se fue de la lengua de repente? ¿Acaso quiere divorciarse? ¡Pensé que sentía algo por mí!'.

"¿Por qué me dices esto?". Sus ojos transmitían temor.

Ella bajó sus largas pestañas y respondió con calma: "Porque la familia Lind se ha negado a cumplir con su parte del trato. Les pedí que me pagaran, pero se negaron. Y no solo eso, también movieron sus hilos para que el hígado que le iban a donar a Hannah lo destinaran a otra persona. Como comprenderás, no tuve más remedio que sincerarme".

La mujer lo miró y continuó: "Lamento haberte engañado. Entiendo que te molestes y no me opondré si quieres divorciarte de mí".

"¿Divorciarme?", murmuró Ethan.

Era más fácil decirlo que hacerlo. Además, él no quería.

"¿Crees que me puede interesar una perra como Jocelyn?". Él la miró fijamente con un brillo inexplicable en sus ojos antes de caminar hacia ella. Mirándola a los ojos, añadió: "Parece que me conoces poco. Te diré algo. No existe ninguna mujer en el mundo que pueda compararse contigo. Eres tú a quien quiero".

Las mejillas y las orejas de Janet se pusieron rojas al escucharlo. Entonces, miró al suelo y comenzó a juguetear con los dedos.

Jocelyn, que había estado de pie en la escalera, se enojó al escuchar la declaración de Ethan y, con el rostro ardiendo de rabia, gritó: "¿Por qué? ¿Cómo te atreves a decir eso? ¿Qué hace que esta perra sea mejor que yo? Ethan, pensaba que eras un hombre con buen gusto, pero estaba equivocada. ¡Eres ciego y estúpido!".

La mujer creía que él se divorciaría de Janet y le pediría matrimonio.

Por supuesto, no iba a aceptar su propuesta; lo único que quería era lastimar a la otra y dejar claro que era mejor que ella en absolutamente todo.

El hombre optó por ignorarla. Entonces, les lanzó a Bernie y Fiona una mirada fría y dijo: "¿Para qué molestarse? El matrimonio sustituto no tenía sentido. Deberían haberme dicho desde el principio que habían cambiado a sus hijas. Nunca tuve interés en Jocelyn. Tiene mala reputación y un carácter terrible, además de ser fea. Ningún hombre en su sano juicio querría tener nada que ver con ella, y mucho menos casarse con ella. Janet es diez mil veces mejor".

La pareja temía que Ethan se enojara con ellos al enterarse de que su novia había sido sustituida. Pero todo lo contrario; de hecho, estaba rebosante de felicidad, pues albergaba un profundo odio hacia Jocelyn. Como no podía ser de otra manera, Bernie y Fiona se molestaron.

Esta soltó con desdén: "Cuidado con lo que dices, Ethan. No seas tan arrogante porque solo eres un hijo ilegítimo de la familia Lester. En lo que a mí respecta, no eres más que un bastardo impresentable. Eres un descarado por hablar mal de mi hija en mi presencia".

"¡Ahórrate tus palabras! Ya veo de dónde saca Jocelyn sus malos atributos. Es un clon de ti. ¡No son más que una familia vil!", replicó el hombre de inmediato.

Dicho eso, se volvió hacia Janet, que aún tenía la cabeza gacha. Se la levantó y dijo cariñosamente: "Eres única. ¿Cómo pudiste aguantarlos durante tanto tiempo?".

A pesar de las palabras de rechazo de Ethan, Fiona aún defendía a su hija. "¡Discúlpate con mi hija o no saldrás de aquí hoy!".

"¡Pfff! ¡Bueno, me disculparé!". Una expresión asesina apareció en el rostro de Ethan. De repente, tomó una botella de vino, sujetándola por el cuello, y la estrelló contra la mesa. El vino se derramó en el piso y tiñó la alfombra. La botella quedó con puntas afiladas.

"¡No! ¡Mamá! Quiere apuñalarnos. ¡No dejes que se me acerque!". Jocelyn estaba tan asustada que su rostro palideció. Corrió a su habitación y cerró la puerta de un portazo.

El miedo también se apoderó de Fiona, quien observaba la botella y la feroz expresión del rostro del hombre. El corazón comenzó a latirle a toda velocidad y retrocedió varios pasos.

'¡Ay, Dios mío! ¡Janet y Ethan están locos!'.

Ethan avanzó dos pasos. Sus ojos estaban provistos de emoción, y parecían el abismo.

"Por favor, cálmate, Ethan. Fiona, deja de discutir con él. Debes asumir que nosotros somos los culpables. Le prometimos a la familia Lester dar la mano de Jocelyn a su hijo hace muchos años. Y no cumplimos nuestra promesa. ¡Tiene todo el derecho del mundo de estar enojado!". Bernie regañó a su esposa en un intento por sembrar la paz. Ser un hijo ilegítimo no cambiaba el hecho

de que la familia de Ethan era muy poderosa. Tanto era así que nunca saldría a la luz ningún escándalo sobre ellos. Es más, si él los mataba a todos, los Lester enterrarían la verdad y nadie se enteraría de lo sucedido.

Al ver que Bernie estaba entrando en razón, Ethan arrojó la botella rota a un lado y se limpió los dedos con un pañuelo. Seguidamente, miró a la pareja asustada y dijo: "Puedo dejarlos ir por haberme engañado. Me hicieron un favor sin saberlo. No saben cuánto me alegro de que Janet se haya convertido en mi esposa. No obstante, le deben dinero y tienen que dárselo".

Tirando el pañuelo al suelo, tomó la mano de Janet y se fue.

La Novia Más Afortunada.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora