La Novia Más Afortunada.

Capítulo 173. - Crear problemas

Ethan se puso una chaqueta negra sobre el pijama y dijo en voz baja: "Probablemente Hannah ya esté dormida. Voy al balcón a tomar un poco de aire, así que puedes dormirte primero".

"Está bien", dijo Janet, sin pensarlo demasiado.

Después de todo, si Ethan no estaba, tendría la cama para ella sola y podría descansar mejor.

Ethan se llevó al balcón una lata de cerveza helada y algunos documentos de la empresa que quería revisar. Después de terminar la bebida, regresó a la habitación.

Janet se había quedado dormida de su lado y tenía apretado con fuerzas el cubrecama, pero una pierna suave y delgada asomaba por debajo del borde de las mantas.

"Estás durmiendo de una manera muy desordenada", resopló el joven mientras la arropaba bien. Se sentó en el borde de la cama y miró durante un largo rato la figura dormida. Finalmente, se acostó a su lado.

...

El lunes por la mañana.

Janet estaba bastante nerviosa desde que dormía en la habitación con Ethan. Como resultado hoy se había quedado dormida y se le hacía tarde para el trabajo. Se lavó rápido y salió corriendo con un pan en la mano para desayunar por el camino.

"¡Espérame!", gritó Ethan. Llevaba una gorra de béisbol negra y una sudadera gris con capucha sobre una camiseta blanca. La alcanzó y se ofreció a llevarle el bolso.

"¿Qué? ¿Por qué? ¿Hoy no vas a trabajar?". Janet lo miró con curiosidad, aunque secretamente se sintió feliz de que la acompañara.

Ethan estaba esperándola en el rellano de la escalera. Bajó la cabeza. El ala del gorro cubría sus ojos fríos y sus labios delgados se curvaron hacia arriba en una sonrisa encantadora.

"Los cobradores de deudas podrían venir a buscarte otra vez. Solo quiero asegurarme de que llegues segura al trabajo".

"Eso podría causarte problemas a ti. ¿Qué pasa si llegas tarde a tu trabajo? Estoy segura de que esos matones no saben dónde trabajo, nunca revelé ninguna información personal". Janet no quería molestarlo, así que estiró el brazo para recuperar su bolso.

Sin embargo, Ethan se lo impidió. Luego la abrazó por la cintura y la acompañó al exterior del edificio de departamentos. "¿Qué? Le pedí a mi jefe una licencia por el día".

Janet lo miró con impotencia, sin más alternativa que aceptar.

Cuando llegaron a la acera de enfrente de su oficina, vio que había un grupo de personas reunidas en la puerta y armando bastante alboroto.

El grupo de matones que venían a reclamar por su deuda había colgado pancartas en la entrada del edificio. Las pancartas tenían grandes letras en color rojo.

"Janet no paga sus deudas".

"¡Paga tus deudas, Janet!".

Quizás esos tipos habían ido primero a la casa de Hannah y al no encontrar a nadie, habían venido hasta aquí.

"¿Cómo me encontraron?". Janet estaba congelada en el lugar, demasiado sorprendida para moverse.

Aunque no había dado ninguna información personal, al parecer estas personas eran inteligentes. Probablemente se habían esforzado para descubrir dónde trabajaba.

El incidente con Fiona había sido hacía unos días, por lo que este asunto iba a causarle muchos problemas y a arruinar su reputación todavía más.

"¿Quién es esta Janet y por qué nos causa tantos problemas siempre?", dijo una empleada que pasaba mientras leía las pancartas con el ceño fruncido.

"No estoy segura, pero escuché que está en el Departamento de Diseño. Sus padres adoptivos vinieron hace unos días a la empresa y armaron una escena. Me pregunto qué estará pasando ahora". Una mujer baja y robusta que estaba cerca cruzó los brazos sobre el pecho y dijo con arrogancia: "Estuvo molestando a otros para que le devuelvan dinero, pero ahora es ella la que tiene deudas. ¡Qué hipócrita!".

La expresión de Janet se ensombreció. Estaba a punto de acercarse a darles una lección a esas mujeres chismosas, pero Ethan la detuvo.

La agarró de la muñeca y la atrajo a su lado. Con voz tranquila y calmada dijo: "No lo hagas. Si descubren que estás aquí, no te dejarán entrar al edificio y las cosas solo se complicarán más".