Capítulo 123. - Sobre su madre

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En el interior del auto, el ambiente se volvió tenso y silencioso. Era tan incómodo que ni siquiera el conductor se atrevió a hacer el mínimo sonido.

Afuera, los árboles se mecían mientras el viento silbaba entre sus ramas, como un fantasma cantando en la oscuridad de la noche.

Ante la pregunta de Janet, la expresión de Ethan se volvió dura y severa.

"No hay problema si no quieres hablar de eso. Solo olvídalo. Lamento haber sacado el tema", ella se disculpó de inmediato, sintiendo que había hablado de más: "Solamente tenía curiosidad, no era mi intención ofenderte".

Entonces respiró hondo y giró la cabeza hacia la ventana, concentrándose silenciosamente en el paisaje exterior.

La joven no pudo evitar preguntarse qué estaba pasando con ella esa noche. Tal vez toda la bebida de la fiesta le había dado el coraje suficiente para preguntarle a Ethan algo tan personal.

Para su mala suerte, falló en el primer intento.

Mientras estaba perdida en sus pensamientos, Janet sintió una mano cálida sosteniendo la suya.

Se dio la vuelta de inmediato y se encontró con los profundos ojos de Ethan, quien se humedeció los labios y dijo: "¿No querías saber sobre mi madre? Estás sentada muy lejos de mí y así no podemos hablar sin gritar".

Luego de un breve parpadeo, Janet miró a su alrededor y se dio cuenta de que él tenía razón, pues estaba tan arrinconada en la puerta como si quisiera poner la mayor distancia posible entre ellos.

Justo cuando ella estaba a punto de acercarse, el auto se detuvo frente a su apartamento.

"¿Ya llegamos?", Janet murmuró con tristeza e hizo un puchero ya que Ethan aún no le decía nada.

Al ver la decepción en sus ojos, él salió del coche y la ayudó a que hiciera lo mismo. Inmediatamente se quitó el abrigo, lo envolvió alrededor de sus hombros y susurró: "Vayamos a dar un paseo, ¿de acuerdo?".

Dado que el abrigo le quedaba bastante grande, Janet quedó envuelta en él y solo se podían ver sus enormes y brillantes ojos. Asintiendo ansiosamente, ella curvó sus labios en una ligera sonrisa y exclamó: "¡Sí, vamos!".

Y así, juntos caminaron hasta los bancos del pequeño parque que se encontraba cerca de su apartamento. Con unas enredaderas moradas colgando por las columnas de concreto, el lugar se veía realmente encantador.

"Bueno, ¿ya me lo vas a decir?", Janet dijo en tono expectante, jalando la manga de Ethan y mirándolo como lo hacen los niños cuando piden caramelos en Halloween.

El hombre frunció los labios en una línea recta y se puso serio de nuevo. No obstante, respiró lo más hondo que pudo y empezó a hablar.

"Mi madre nació en una familia rica, pero su situación financiera se desplomó después. Nunca fue una amante, como decían los rumores. Fue mi padre quien la forzó a estar con él y por eso terminó embarazada. En ese momento, ella no podía luchar contra él, y por eso mi padre afirmó que solo era una mujerzuela que se le había metido a las sábanas. Debido a su mal estado de salud, ella no podía abortar, así que me dio a luz y bueno, heme aquí".

Luego de escuchar su declaración, Janet inclinó la cabeza para mirarlo. A pesar de que Ethan se veía tranquilo, había cierto rastro de desprecio en su tono.

Además, puesto que había omitido cómo murió su madre, seguramente había algo más que lo afectaba.

Pero ella no quiso preguntarle más; podía decir que su madre ocupaba un lugar especial en su corazón y eso era evidente.

Sin embargo, para proteger a Janet antes, Ethan había sacado el tema de su madre frente a todas esas personas.

"Tengo que agradecer a tu madre por haber criado a un excelente hombre", con eso, Janet sonrió dulcemente y envolvió sus brazos alrededor de la cintura de Ethan.

Enseguida, presionó una de sus mejillas contra su pecho y aspiró su deliciosa fragancia a menta, hundiendo la nariz en su ropa y absorbiendo su olor.

Ethan se rio entre dientes, apoyó la barbilla en su cabeza y preguntó: "¿Qué pasa? ¿No tienes miedo de que te devore?".

Pero Janet le dirigió una mirada astuta, y en lugar de responder, presionó sus suaves labios contra los de él.

La Novia Más Afortunada.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora