Capítulo 44

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Dos meses después...

He estado saliendo con Mark y lo he acompañado a sus tratamientos. Se ve muy contento por el hecho de estar conmigo y ver que lo apoyo.

También estos dos meses he salido con Martha a fiestas, a comer helados o de compras ya que seguimos de vacaciones. En cuanto a mi madre, la han despedido ya tres veces del trabajo por irresponsabilidad y aunque no sé qué se trae en mente debo decir que ha estado muy rara.

No he intentado hablar con Royce para intentar explicarle, me da igual lo que piense. No sé cómo tomará la noticia de que salgo con Mark, o si lo sabe, de mi parte aún no he dicho nada.

Agarro el móvil que vibra sobre la mesa y es Royce quien está llamando.

—¿Qué quieres?

—Tu madre me ha pedido que te llame. Quiere invitarte a cenar hoy.

—Últimamente te ha pedido muchas cosas si se trata de mí. Está bien, estaré en tu casa a las siete.

Tengo hora y media para arreglarme. Genial. Voy a la habitación y busco lo que me pondré. Mientras me cambio suena el timbre y descarto la idea de que sea él.

—No estás acompañada, ¿cierto?

—No tonta, estoy arreglándome para ir a casa de Royce. Han organizado una cena.

—Has roto mi corazón —lleva la mano a su pecho y dramatiza.

—¿Por?

—Venía invitarte a una fiesta.

—No creo que la cena dure hasta tarde, así que vamos a la cena y después nos vamos a la fiesta.

—Ay no, qué pena —se tira al sofá—. Si no me han invitado.

—Déjate de tonterías y vamos.

(...)

Mi madre nos abre la puerta y cuando entramos noto que la mesa ya está lista.

—Ya Royce está por bajar para comenzar a cenar.

Entra a la cocina y junto a mi amiga me siento en la sala. Estoy realmente confundida con todo esto, no entiendo porqué han organizado una cena.

Unas risas se escuchan desde el jardín. Frunzo el ceño.

—Y reaccionó así cuando le dije que no iríamos —escucho unas voces desconocidas para mí y una chica entra a la sala sonriendo. Le sigue otra señora que ríe y deja de hacerlo al verme.

—Hija, ella es la madre de Royce y su hermana.

—Camila. Mucho gusto —les digo sonriendo.

—No sabía que tenías una hija de mi edad, Dafne. Mi hermanito nunca me lo comentó.

—Hija por favor —le reclama indiscretamente su madre.

—Soy sincera mamá. Eres muy guapa Camila, te pareces a tu madre. Creo que tú y yo nos llevaremos bien.

No digo nada porque en ese momento aparece su hermano y nos dirigimos a la mesa. No entiendo porqué Royce no les habló sobre mi.

Nos sentamos en la mesa y Martha me mira incómoda, sé que siente que está estorbando pero no es así. Lo contrario, agradezco que haya venido para no sentirme sola.

—Espero y les guste la cena —dice mi madre antes de dar el primer bocado.

—Está riquísima —añade la madre de Royce—. ¿Cómo lo has hecho? De seguro lo hago y no me queda igual.

Tengo a Royce sentado justo al frente y eso me incomoda.

—Toda esta idea de la cena fue mía. Aunque él también estuvo de acuerdo. Queremos informarles que... —deja de hablar y sólo con la mirada de mi madre siento nervios.

—Dafne sospecha que...

—Creemos que, Camila hija, creemos que tendrás un hermano.

Al escuchar aquello siento que todo da vueltas, y me fijo en la cara de los presentes que sonríen. Es como si me hubiesen echado un balde de agua fría.

—¡Genial! ¡El primer nieto!

—Es fantástico hermanito. Pero ya va, ¿no es seguro? ¿Por qué dicen creemos?

—Hija, ¿no dirás nada?

Me levanto y Martha también lo hace pero la ignoro y me dirijo al baño.

—¡Camila! —me llama cuando estamos en la siguiente planta.

—Necesito estar sola Martha. Lo digo en serio.

—No sé qué decirte amiga, pero sabías que esto podría ocurrir.

—¡Lo sé! —alzo la voz y siento mis mejillas húmedas—. Pero no así, no después de haberme entregado a él o al menos no tan pronto. Necesito estar sola. Baja y diles que estoy bien.

Cuando estoy sola nuevamente entro al baño y tengo la enorme necesidad de lanzar todo al piso y echarme a llorar, pero me controlo en cuanto a lo de tirar todo. Sabía que esto iba a ocurrir, ella querría otro integrante en la familia pero ¿por qué él? ¿por qué tuvo que conocerlo? ¿por qué me lo presentó? ¿por qué estoy estúpidamente enamorada de él?

Me imagino a mi madre con un bebé en brazos y a veces pidiéndome que cuide de él o ella. A alguien diciéndome hermana después de que yo engañé a nuestra madre con su padre.

Abren la puerta y rápidamente seco las lágrimas por si de mi madre se trata pero éstas siguen cuando veo a Royce.

—Tenemos que hablar.

—Yo no —le doy la espalda y me cruzo de brazos—. Estoy saliendo con Mark.

Le digo esperando a que reaccione mal, o al menos le den celos pero no dice nada. Se lo he dicho porque necesito que deje de buscarme, porque sé que siempre me dejaré encontrar si se trata de él.

—¡Eres un imbécil! ¡Te acuestas conmigo para luego embarazar a mi madre! —intento cachetearlo pero él agarra mi mano—. Eres igual o peor que algunos. Tendré un hermano Royce, tu hijo. ¿Sabes cómo me siento ahora mismo? —mi voz se debilita y termino en llanto—. No quiero que me busques, no quiero tener algún otro tipo de contacto contigo si no se trata de mi madre y su bebé.

—Camila, yo...

—Sal ahora mismo y déjame sola si no quieres que baje y le cuente a todos lo que hemos hecho. Mira que tú ahora sí perderías mucho.

Double Vision (Prince Royce)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora