Omnisciente
La segunda en despertar al día siguiente es Dafne porque su suegra entra a la habitación justo a las seis y media. Se ducha apresuradamente cuando recuerda que los que se encargarán de decorar el jardín llegarán a las siete.
Dos horas después despiertan los demás, excepto el protagonista del día de hoy. Él si lo había hecho muy temprano pero después de intentar llamar otra vez a Camila, volvió a acostarse.
—¿Geoffrey aún no ha despertado?
—No. Supongo que está cansado, déjalo dormir otro rato más —contesta Dafne.
¿Cómo es que ella puede estar tranquila estando consciente de lo que pasará pronto?
—¡Afuera están algunos arreglos florales! —grita Ángela desde el sofá encargándose de algunas cajas.
—Iré por eso.
Todo está bastante avanzado; la decoración blanca con beige, algunos globos, adornos florales, la mesa donde va el pastel y donde se harán algunas sesiones fotográficas.
Sus otros dos hermanos y su padre han ido a donde se realizará la ceremonia para ver qué tal todo por allá.
Pasa otra hora y él ya ha despertado pero se encuentra en la tierna habitación admirando lo rápido que ha sido decorada. Su hermana entra y se para a un lado.
—Dafne ya se ha ido al salón de belleza y tú aquí —le dice, pero él no responde—. ¿Me escuchas?
—Sí. ¿Por qué tan temprano? —la mira finalmente para luego ponerse de ponerse y salir de la habitación.
—Las novias son así, suelen arreglarse horas antes. Además no puedes verla hasta más tarde ya que dicen que es de mala suerte.
—¿Más de la que tengo? No creo.
Se dirige a la cocina con su hermana tras él.
—Tu desayuno está dentro del horno.
—No tengo hambre.
—¡Pero debes comer! —Shanelli alza la voz—. Voy afuera para asegurarme de que todo esté en orden.
—Bien.
Busca en el bolsillo de su pantalón y le marca a la única persona que puede saber sobre Camila ahora.
—¿Martha?
—¿Quién habla? —la pelirroja se hace la desentendida.
—¿Sabes quién es. ¿Sabes algo de Camila? La he estado llamando y n...
—¡No sé! ¡Debo colgar!
Después de decir eso, corta. Éste gruñe molesto dejando el móvil a un lado y termina de beber la leche.
Camila
—¿Quién era? —le pregunto a mi amiga cuando sale del baño.
—Daniel. Preguntándome que en dónde estoy.
—¿No me has dicho que fue él quien te trajo aquí?
