Capítulo 167.

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Tres semanas más tarde

Las cosas continuaban del mismo modo, Rose estaba estable pero permanecía en coma, mientras que por otro lado el bebé iba mejorando. Esa misma tarde recibiría el alta por lo que tanto Jennifer, como Pam y George se habían tomado el día para acomodar todo en casa de Simon. Al ser todo tan apresurado jamás habían tenido el tiempo de armar la cunita correspondiente, tampoco de armar el bolso del pequeño, apenas y Rose había podido acomodar parte de su ropita en una cajonera que habían adquirido un mes antes.

- Muy bien, en el primer cajón esta su ropita, en el segundo hay pañales y en el tercero hay cremitas, toallitas y demás cosas para la higiene del bebé-informo Jennifer una vez que termino de ordenar todo-de cualquier modo le diré a Simon cuando llegue.
- Estupendo-hablo George-yo estoy preparando la cena así no tiene que preocuparse por eso más tarde.
- Genial pá-le hablo Pam-por cierto, ya deberíamos ir a recoger al bebé ¿no creen? Porque Simon no hará tiempo, sale en hora y media del trabajo.
- Andando, no hagamos esperar a nuestro sobrino-dijo una sonriente Jennifer-bueno, también nieto.

Soltó una risita mientras veía al señor Gallagher.
Enseguida los tres salieron de la casa emprendiendo rumbo hacia el hospital, hubo que firmar algunas cosas, recibieron las indicaciones correspondientes del pediatra y una vez libres pudieron regresar a casa, esta vez, en compañía del pequeño bebé.

- Bienvenido a casa posible Kurt-bromeo Jen hablando en susurros para el bebé.
- Boba-rio Pam-¿Simon llegaste?

Pregunto pero no obtuvo respuesta alguna, dejando en evidencia que su cuñado aún no había llegado a la casa.

- Iré a recostar al pequeño en su cunita.

Informo George, que era quien estaba con su nieto en brazos. Enseguida camino por el pasillo hacia el dormitorio y con sumo cuidado fue dejando al niño en la cunita.
Lo observo por unos momentos y le fue inevitable no emocionarse, ni sentir aquel nudo en su garganta al recordar a su hija y percatarse de todo lo que estaba perdiéndose.

- Tu mamá estará aquí contigo muy pronto pequeño, ya verás-le aseguro mientras tomaba la manita del bebé-puedo asegurarte que serás el niño más amado del planeta.

Unas cuantas lagrimitas se le escaparon, con toda la emoción que tenía Rose en relación al bebé, sus deseos de poder por fin tenerlo en brazos y que ahora estuviese perdiendoselo por culpa de aquel accidente...simplemente no lo consideraba justo.

[...]

Alrededor de media hora más tarde Simon se hizo presente en la casa. Traía una notoria expresión de cansancio, solo quería llegar, cenar algo y acostarse a dormir, de cualquier modo en el instante en que vio a aquellos tres en su casa supo el motivo. Lo recordaba perfectamente, solo había tratado de evitarlo.

- Que bueno que llegaste-hablo Jennifer-tenemos una sorpresa para ti.

Lo tomo del brazo para ir direccionándolo por aquel pasillo hasta su habitación, apenas estar en la puerta del cuarto alcanzo a oír aquellos soniditos que su bebé hacía con su boca.

- Dile hola a tu bebé-sonrió la blonda observando al pequeño en la cuna-es un pequeñín muy bueno, míralo nada más, había despertado y no causó ningún problema.
- ¿Por qué está aquí?
- ¿Qué?
- ¿Por qué lo trajeron aquí?-pregunto Simon, manteniendo la seriedad.
- Pues porque...vive aquí ¿no?
- No lo voy a cuidar-aclaro de antemano el chico-no puedo hacerlo, no sin Rose.
- Si puedes tonto, no estás solo en esto, Pam y el señor Gallagher te ayudarán, Liam y yo también -garantizo la blonda-y no mencionemos a Sam, el te acompañara en todo momento no te preocupes.

El joven no dijo nada, con rapidez se acerco a su nave para adentrarse en ella, dejando ver que una nueva crisis había iniciado.
Dentro de lo positivo, parecía no ser tan fuerte, es decir hay ocasiones en las que Simon se desespera y comienza a gritar o romper cosas, en este caso solo se encerró en su nave en silencio y "tranquilo", lo cual Jennifer agradeció internamente, principalmente porque con el bebé allí una crisis fuerte no seria lo más conveniente.

Habrá pasado alrededor de media hora, Jennifer se había encargado de dar aviso a Sam de lo que sucedía y este prometió ir tan pronto como le fuera posible.
Entre tanto, George aprovechó para darle biberón a su nieto, quien desde que llegó apenas había llorado unas dos o tres veces y por muy pocos minutos, realmente era un niño muy tranquilo.

Para cuando Sam llego supo comprender la crisis de su hermano, no es que los demás estuviesen haciendo algo malo pero fue algo tan repentino que entendió porque aquello abrumo a Simon.

- Simon...

Hablo Sam sentándose en un costado de la cama.

- ¿No saldrás?-cuestiono no recibiendo respuesta alguna-Simon yo comprendo lo que sientes, comprendo que estás abrumado, espantado por la situación-comento-pero ese bebé te necesita. No quiero espantarte aún más, pero es tu hijo y ...en este momento, muy a pesar de nosotros, tú eres todo lo que tiene.
- ¿Cuándo vendrá Rose?-se escucho desde dentro del barril.
- Te dije que no lo sé-contesto Sam-pero... parte de Rose está en ese pequeño, ¿crees que podrías darle siquiera una oportunidad?

Simon no respondió, no obstante Sam se puso de pie y camino fuera de la habitación para buscar al bebé. Una vez que lo tuvo en brazos, camino de regreso al dormitorio y volvió a sentarse en la cama.

- ¿Crees que puedas salir un momento?-le pregunto-por favor, luego si quieres te regresas a la nave pero sal un momento .

El castaño se mantuvo en completo silencio, todo indicaba que no saldría, sin embargo justo cuando Sam iba a regresar al niño con su abuelo y sus tías, Simon abrió la tapa de su nave disponiéndose a salir.

Su hermano no artículo palabra alguna, lo dejo salir y hablo cuando lo tuvo sentado junto a él.

- ¿Quieres intentar cargarlo?-le pregunto pero Simon negó con la cabeza-inténtalo, solo un segundo, luego lo tomaré yo nuevamente.
- No quiero lastimarlo-expreso Simon.
- No vas a hacerlo, confía en mí y confía en ti, no vas a lastimarlo-garantizo Sam-toma, con cuidado.

Con delicadeza fue pasando el bebé de sus brazos a los brazos de su hermano, quien estaba bastante tenso se podía notar, sin embargo el hecho de que aceptara cargarlo era un paso gigantesco.

- ¿Cómo te sientes?-cuestiono Sam ocultando una sonrisa, no podía evitar emocionarse ante aquella imagen-¿ te agrada tenerlo en brazos?
- Si-musito Simon sin despegar su mirada del niño.
- Se parece a ti ¿no crees?-sonrió Sam-bueno, yo pienso que se parece a ti cuando eras pequeño-se encogió de hombros.

El bebé observaba todo con curiosidad, desde luego no tenía idea de quiénes eran ellos dos, pero se sentía tranquilo y a salvo con ellos.

- Me esta tocando-soltó Simon cuando rodeo uno de sus dedos con sus manitos.
- No vayas a arrojarlo por favor-fue lo primero que pudo decir Sam-¿pero ya ves? Le agradas, seguramente sabe que eres su papá.
- ¿De verdad?
- En realidad no lo sé-confeso Sam-pero es algo que Rose diría ¿no crees? Ella estaría encantada de verlos juntos y seguramente afirmaría que el pequeño sabe que eres su padre.

Simon no le contestó sin embargo sabia que su hermano no mentía, muy probablemente si Rose estuviese ahí estaría diciendo esas cosas y seguramente estaría feliz de verlo sostener al bebé, eso mismo fue lo que lo hizo sentirse tan a gusto. Volteo a ver al pequeño nuevamente y no pudo evitar sonreír.

Maybe There Are Feelings In Space||Simple Simon [Bill Skarsgard]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora