Capítulo 160.

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Dos meses después.

Narrador Omnisciente

Las cosas no iban bien para Rose y para Simon. Si bien, continuaban juntos y el amor de ambos seguía intacto, algunas cosas comenzaban a convertirse en un cierto desgaste para la pareja. Por empezar, Rose toleraba cada vez menos la indiferencia de Simon, y este se mostraba cada vez más celoso de Caleb , lo cual causaba que discutiera bastante seguido con Rose.

Lilly hace algún tiempo se había marchado de la ciudad, había desistido de ser parte de los planes de su tía por lo que prefirió alejarse de todo eso. No obstante, esto no detuvo a Laura.

Hace un mes había iniciado con su denominado plan B, el cual consistía en enviarle pequeñas notas/cartas a Simon brindándole falsa información. Estas cartas las enviaba a su trabajo ya que de ese modo él las recibiría y leería sin la compañía de Rose.

En las mismas Laura, de forma anónima por supuesto, le contaba a Simon la aventura que estaba teniendo Rose con Caleb, incluso le enviaba fotografías de ellos dos juntos, saliendo. De ahí los celos y rabia de Simon hacia el mejor amigo de su novia.

Junio 2019” indicaba la nota y adjuntas venían unas fotografías de Rose y Caleb ese mismo día, tomando un helado por el parque y una última foto del joven besando el vientre de su amiga.

Simon muy a pesar de sentir celos, había estado intentando evitar esas notas, esas fotografías, ya que luego de confiar en la primer nota que recibió y discutir fuertemente con Rose, había decidido ya no creer en las mismas. No creer en más historias. Pero aquellas fotografías estaban haciéndolo dudar y mucho.

—¡Hola mi amor!

Exclamó Rose al verlo llegar a casa. Camino hacia él para darle un beso y enseguida lo noto más serio de lo habitual por lo que preguntó.

—¿Esta todo bien?

—Si—respondió él quitándose su abrigo—¿la cena esta lista?

—Así es.

Él no dijo más nada, solo camino hasta la cocina, se sentó y se dispuso a cenar tranquilamente.

—¿Todo bien?—preguntó la joven sentándose frente a él.

—Si—le contestó sin quitar la mirada de la comida en su plato.

—¿Estas enojado?

—No.

—Luces enojado—musito ella—dime que pasa ¿Por qué estas así?—pregunto pero su novio siguió en silenció—llevas días de este modo Simon, por no decir semanas la verdad, estas cada vez mas distante y no sé que hacer al respecto—expresó, él solo la miraba—¿es por el embarazo?

—¿Qué?

—Es por eso ¿no es así?—más que una pregunta fue una afirmación de su parte—debí imaginarlo…detestas los cambios, evidentemente detestas que sea prácticamente una bola por malditos nueve meses—espeto.

—Me gustan los círculos.

—¡Simon!—se quejo ella arrojándole una servilleta a la cara—hablo en serio, ¿Por qué estas así? ¿Por qué ya ni siquiera hablamos?

—No lo sé—le contestó él—tú nunca estas en casa.

—trabajo—le recordó ella—aun tengo unos meses por delante de trabajo.

—Cuando no trabajas estas con Jacob, y a  mi no me gusta eso—soltó por fin, dejándole ver cual era el principal problema.

—¿por eso estas actuando así?—pregunto Rose sin poder creerlo—Simon por favor, sabes que él es solo un amigo…mi mejor amigo. No tiene sentido que te sientas así en relación a él porque te aseguro que nada sucederá nunca—garantizó haciendo énfasis en la ultima palabra—además sabes que solo te amo a ti, tontito.

Dicho eso se puso de pie y se acercó a él para abrazarlo. Este le correspondió el abrazo pero por primera vez su atención se poso en el vientre de la muchacha. Desde su posición ahora este se encontraba casi a la altura de su cara por lo que no pudo ignorarlo.

—Esta pateando—dijo Rose soltando una pequeña risita—¿quieres sentir?

Simon la miro con cierta duda, hasta que finalmente se decidió por hacerlo. Llevo su mano hasta el vientre de la muchacha y aguardo expectante algún movimiento de parte de su bebe, sin embargo esto no sucedió tan fácilmente.

—No siento nada.

—Es que se quedo quieto—rio Rose—deberías hablarle.

—¿Cómo?—pregunto el joven notablemente confundido.

—Si, él reconoce tu voz, créeme, se pone como loco cada que te escucha—garantizó Rose—háblale, apuesto a que así si se moverá.

Simon dudo nuevamente, pero sentía realmente curiosidad ahora, por lo que se decidió a seguir la sugerencia de su novia.

—¿Hola?

Pregunto tímidamente, pero el pequeño seguía sin moverse por lo que volvió a preguntar.

—¿Estas ahí?

—No Simon, esta en mi oreja—dijo Rose—por supuesto que esta ahí, tonto—rio deteniéndolo cuando quiso irse—no, discúlpame. Solo fue un pequeño chiste, no te vayas—pidió—inténtalo una vez más, yo no diré nada

Él aceptó y nuevamente le hablo al vientre de la joven, aguardo unos segundos, pensó que al final no ocurriría nada. No obstante, cuando estaba a punto de olvidar el asunto e irse a dormir, percibió aquella patadita que solté el bebe.

—Lo hizo—informó el chico, levantando la mirada hacia Rose—pateo.

Ella apenas asintió y esbozo una sonrisa, estaba realmente contenta pues por fin Simon había mostrado interés en el bebe, es decir, genuino interés. Se lo veía entusiasmado y sonriente al sentir por primera vez un movimiento de su hijo y eso para ella era más que suficiente en aquel momento.

Maybe There Are Feelings In Space||Simple Simon [Bill Skarsgard]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora