Parte 14

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Amanecí cansado, con una erección extraordinaria. ¿Porque tuve que soñar con esa niña torpe?. Mi rutina matutina se vio interrumpida cuando mi timbre sonó, extrañado por esto me acerco a la puerta para ver de quién se trataba. ¿Hobi? ¿Qué hace aquí?

Le abro la puerta y su sonrisa podría eclipsar al mundo completo. Es tan reconfortante. Me abraza y se sienta en la isla de la cocina.

-¡Jinnie! ¿Cómo te ha ido en las clases? - Su entusiasmo siempre me ha agradado.

- Bien, creo que me ha ido bastante bien - Respondo sereno - Solo algunos inconvenientes de los que prefiero no hablar. Nada importante.- ¿Realmente no lo era?

- Te conozco Hyung, si no fuera importante ni siquiera lo habrías mencionado - Dijo asertivo.

- Tengo problemas con una chica - Esquivé su mirada.

- ¿Una chica? ¿Tú? ¡Imposible Jin! - Dijo mientras se tapaba la boca de la impresión - ¿Una acosadora? ¿Quieres que dé aviso a la agencia?

- ¡No! - Grité de pronto cuando veo que se impacta con mi respuesta. Tomé aire y traté de calmarme - No es necesario, no es acosadora, solo es irritante ademas de torpe.

- ¿Torpe? - Reía - ¿Porque le llamas torpe Seokjin?

- Una vez chocó conmigo y me dejó en el suelo - Hoseok no podía parar de reírse mientras aplaudía - Y busca la manera de dejarme en ridículo en todos lados. Es una niña torpe.

- Perdón Hyung pero no puedo evitar reírme. - Calmó su risa para poder continuar - Quizás esa chica esta enamorada de ti y por eso lo hace. Quizás quiere llamar tu atención de alguna forma.

- ¿Tú crees? - Le dije pensando muy bien sus palabras - Pero ella estaba coqueteando con un chico hoy a la salida de clases, no creo que este enamorada de mi como dices.

- Quizás quiera sacarte celos. - Dijo recogiendo los hombros. Bien pensado

Cuando iba de camino a la universidad, las palabras de Hoseok no dejaron de resonar en mi mente una y otra vez, no era tan descabellado pensar que lo que ella quería conseguir era que me pusiera celoso. Como si eso fuera a pasar. Tenía que encontrar la forma de devolverle el gesto de alguna manera, si quería jugar con fuego seria ella la que se iba a quemar. No yo. Tomé rumbo al salón, ella aun no había llegado, estaban algunos compañeros a quienes salude como lo hacia normalmente y una de las chicas se acerca a mí para hacerme una pregunta. Cuando la tenia de frente, veo llegar a Camila, con unos pantalones ajustados azules, una camiseta negra que también se ajustada a sus curvas, tacones color negro brillante y el cabello recogido al máximo. ¿Quería matarme? ¿Porque lucía tan sexy hoy? .Mi vista no podía dejar de mirar su escote, aquella camiseta dejaba al descubierto sus voluptuosos pechos y comencé a tragar saliva en varias ocasiones. La deseo. No sé porque rayos la deseo tanto

Deseo PúrpuraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora