056 - ¡𝐌𝐄 𝐕𝐀𝐋𝐄 𝐔𝐍𝐀 𝐌𝐈𝐄𝐑𝐃𝐀!

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NARRA Jin

Me dirigí a la puerta después de escuchar que el timbre sonaba exageradamente.

—Ya voy —grité irritado por el timbre— ¿Qué les pa...? —me quedé callado al ver a mis padres y suegros parados fuera de mi departamento.

—¿Con qué derecho te atreves a traer a mi hija? —reclamó mi suegro.

—Soy su esposo, ¿Se le olvida?

—¿Y? No eres más que eso, ella es mi hija y tú no tenías el derecho de hacer algo con ella sin consultarme.

—Ya estoy cansado de sus insultos hacia mí, así que le dejaré en claro que ustedes no van a participar en las decisiones mías y de Nara —todos se adentraron al departamento sin permiso.

—Deja de jugar al esposo perfecto, Jin, ella es mi hija y nadie tiene el derecho de decidir sobre ella.

—Claro que hay alguien, ¡ELLA MISMA! Ella tiene cumplidos sus 21 años, es mayor de edad, y puede tomar sus malditas decisiones como se le antoje en gana, así que, padres, suegros, los invito a retirarse de mi departamento. Nara no los quiere ver, respeten su maldita decisión de una vez.

—Donde me entere, Jin, que tú le has lavado la cabeza o la has puesto en contra de nosotros, te la verás conmigo.

—¿Está seguro que yo hice algo como eso? Porque si no mal recuerdo, el que la insultó y pegó hace unos días no fui yo.

—¿Es que no tienes otra cosa con qué defenderte que solo esa? Ya, supéralo. Estoy seguro que ella también lo hizo.

—Supérelo usted. Ella no lo quiere ver, no los quiere ver, entiendan de una maldita vez.

—Hijo, ya basta —intervino mi madre —. Son sus padres, no puedes interponerte entre ellos tres.

—Claro que puedo, soy su maldito esposo, que la ama, y por culpa de ellos la estabilidad emocional de ella está por los suelos —dije señalándolos despectivamente —. Si para que ella esté tranquila y en paz yo me la tengo que llevar lejos de aquí, lo voy hacer, así que si terminaron su show los invito a retirarse.

—Jin —habló mi suegra. Su rostro no era el mismo que siempre se cargaba.

Ella era una mujer con un aura de autoridad completa. Su porte elegante, calculador y que con solo su presencia podía hacer que cualquiera se arrodillara era respetable, pero el semblante con ojos apagados y cabeza gacha que me estaba mostrando dejaba de lado a la mujer que había visto en ese año.

—Solo déjame verla un momento por favor. Déjame hablar con ella. ¿Ya almorzó? —negué con mi cabeza.

—Apenas desayunó, no quiso comer mucho —ella solo sonrió con completa nostalgia.

—Yo traje almuerzo para ustedes, déjame llevarle algo de comer. Te prometo que si veo que se altera saldré de ahí y no la veré hasta que ella lo pida, pero por favor déjame intentarlo —lo pensé muy bien y al final accedí.

A pesar de todo, ella era la única que estaba llevando las cosas con calma y respetando al máximo las decisiones de Nara. Al parecer se puso en su lugar.

—No, Seyeon, deja de pedirle permiso, tú puedes entrar a verla cuando quieras.

—Ya basta, Dohyung, le hicimos daño, entiéndelo. Tú la atacaste por un error, Hoseok también la atacó sin pruebas y yo, yo no la defendí ante ustedes dos. ¿Aun así piensas que tenemos derecho de mandar en su vida? La entregamos a un hombre que ella no amaba y ni siquiera en su mente conocía, fue como haberla vendido otr...

♣️HOUSE ♥️OF♦️ CARDS♠️ (Kim Seok Jin)🔞 #PGP2022Donde viven las historias. Descúbrelo ahora