♣️HOUSE ♥️OF♦️ CARDS♠️ (Kim Seok Jin)🔞 #PGP2022

074 - 𝐍𝐨 𝐩𝐨𝐝í𝐚, 𝐧𝐨 𝐪𝐮𝐞𝐫í𝐚, 𝐲 𝐧𝐨 𝐥𝐨 𝐢𝐛𝐚 𝐡𝐚𝐜𝐞𝐫

NARRA Jin.

8 meses y 10 días habían pasado desde el día en el que ella se fue. Mi estado de ánimo se convirtió en una mierda, mi carácter se volvió una mierda, al igual la forma de comportarme con mi familia. Nada volvió a ser lo mismo desde el 3 de septiembre en el que me levanté y descubrí que ella ya no estaba ahí. La depresión se apoderó de mí, y vaya que es difícil en las noches soportar los pensamientos.

Me sentía ella, sentía que por fin entendía todo. Los recuerdos no llegan a mí, pero sí soñaba con ellos de vez en cuando, pero no lograba recordarlos a la perfección cuando despertaba.

«A veces siento que no puedo»

Los fines de semana llegaba mi madre y a veces mis hermanos junto con Taehyung intentando subirme el ánimo, pero era en vano. Me peleé con ellos cuando trataron sacarme del departamento para que dejara de vivir ahí, pero era lo único que tenía de ella. Antes tenía a Sebastiano, pero unos meses después de que ella se fuera él también desapareció y no volvió, y fue ahí cuando volví a tener un bajón emocional. Me peleé con muchos, mis padres y los suyos fueron los primeros.

Con el tiempo me di cuenta de que no tuve la culpa, sino ellos. Por sus culpas pagamos nosotros dos, y yo estaba solo. Taehyung y Namjoon también sabían todo, y eso me dolió más. Jimin se hizo más cercano a mí e intentó por todos los medios encontrarla, pero nunca fue posible.

Mis padres hicieron muchos llamados para tener una conversación profunda conmigo después de muchos meses, pero yo no tenía ganas de que me explicaran nada; sin embargo, acepté visitarlos con la condición de que no hablaran del tema.

—Hola, hijo —me saludó mi padre. Incliné levemente la cabeza para no faltarle el respeto.

—¿Para qué me mandaron a llamar?

—Los Jung tienen algo que decirte —no me había fijado cuando entré, pero mis suegros estaban sentados en un sillón como si nada.

—Hablen —«si ellos iban a fingir que todo estaba bien, era su problema, pero yo no podía, mejor dicho, no quería ser gentil»

—Daré la orden para que dejen de buscar a Nara —dijo mi suegra como si me contara que ayer fue de compras.

—¿Se rendirán tan rápido?

—Me llegó una carta de parte de ella —en ese momento se me aceleró el corazón—. Al parecer la escribió hace muchísimo tiempo y tenía fecha de entrega ya establecida.

—¿Puedo leerla?

—No lo creo, era personalmente para mí. Es momento de dejarla ir, Jin. Lamento que todo llegue hasta este punto, pero es momento de aceptar su decisión. Ella ya no es una niña, y sé que te ama demasiado, pero la perdimos. Le hice daño.

—Todos se lo hicimos —hablé después de estar unos segundos en silencio—. Yo también le hice mucho daño, y, aun así, siguen siendo los únicos culpables. Sigan cargando con su consciencia sucia porque lo único que hicieron fue arruinarnos, y eso jamás se los voy a perdonar. Nadie sabe dónde está, nadie sabe si está bien, es más —reí con ironía y nostalgia— nadie sabe siquiera si ella sigue viva.

—¡Jin! —gritaron mi suegro y mi padre al mismo tiempo.

—¿Qué? Si teniéndonos al lado lo intentó, ¿qué nos asegura que ahora que está sola no lo ha hecho?

—Sé que mi hija está bien, lo siento aquí —dijo mi suegra colocando su mano en el pecho—. Por eso vine para decirte que nos alejaremos de ustedes, de ti. No queremos recordarte que Nara ya no está y que todo fue nuestra culpa. Ódianos, estás en todo tu derecho, pero ya no busques a Nara. Ella volverá cuando se sienta lista.