♣️HOUSE ♥️OF♦️ CARDS♠️ (Kim Seok Jin)🔞 #PGP2022

011 - 𝐂𝐚𝐫𝐢ñ𝐨

NARRA Nara

Le entregué la prueba de embarazo y aun así me tuve que aguantar sus reproches. Entendía que la sorpresa hizo que casi se le salieran los ojos, pero no estaba dispuesta a seguir aguantando su fastidioso ser. Lo raro fue que solo se encerró en su habitación y dejó que pasaran dos días en el que permaneció frío y distante. No me hablaba, ni siquiera lo veía.

«Es un imbécil. Ni sabiendo que tendría un hijo cambia»

Hace una semana no iba al consultorio de Taehyung, y hoy me tocaba cita a la cual pensaba asistir.

—Te gusta desaparecerte ¿Verdad, Nara?

—¿Te causó intriga?

—Claro, me contaron que te vengaste. Yo no fui a la fiesta de tu hermano porque no tenía ganas. ¿Te gustó ver la expresión de tu esposo al ver a Irene?

—Claro, y me aproveché muy bien de la situación. El hecho de que casi me compadezco de que estaba hecho pedazos en ese momento no significa que iba a olvidar lo que me hizo. Ya eran tres veces y no lo podía soportar. Primero, me golpea, sé que yo también participé en la pelea, pero no le daba derecho a golpearme de la manera en que lo hizo. Segundo, me deja en una carretera a mi suerte y luego me vende con alguien que no conozco. ¿Te parece poco?

—Bien, si ya te vengaste espero que dejes atrás ese resentimiento. ¿Sabes? Estuvo las últimas semanas lloriqueando en mi casa y bebiendo hasta más no poder

«¿Así que sigue llorando por ella? Bien, Kim»

—¿Aun lo hace? —pregunté.

—Incluso ayer seguía llorando por ella.

«Mientras yo esperaba a que se dignara hablarme ¿Él seguía llorando por una zorra?»

—Solo te diré que mi venganza no ha terminado, Taehyung. Me dolió mucho lo que hizo, y no porque viniera de él, sino porque tocó una parte de mí que no debió nunca. Mis traumas del pasado volvieron por culpa de él aunque tú lo defiendas.

—¿Seguirás vengándote? Eso es malo, Nara. No solo para él sino para ti también.

—Me importa un carajo.

—Estás loca —afirmó

—Ya lo sé, por eso estoy aquí hablando con un cura locos, pero esas no son las palabras correctas que un psiquiatra le tiene que decir a su paciente.

—Ok, señorita Jung. ¿Me puede decir qué planea hacer?

—Ese mismo día en el hotel, reservamos una habitación, nos fuimos a quedar ahí ya que por alguna extraña razón nuestros padres no nos dejaron conducir como si fuera el pecado más grande del mundo conducir —sentí cuando Taehyung apagó las luces y yo proseguí —. Nos fuimos a la dicha habitación y el pidió una botella de vodka para ahogar sus penas, supongo. Me fui a sentar al lado de él porque me dio lástima su estúpido llanto patético. Tomé un trago del dicho vodka. ¡Iukk! estaba amargo, lo recuerdo a la perfección —reí como loca —. Él ya estaba fuera de su noción, intentó besarme, pero me giré. Odio el simple hecho que me haya besado el día de nuestra boda, pero no se quedó con el rechazo porque empezó a besar mi cuello.

—¿Se acostaron? —preguntó con su voz ronca.

«Si no estuviera casada seguro este sería mi hombre, aunque no sea mi tipo»

—No, no hicimos nada, pero mi venganza seguía en pie ¿Y qué mejor que aprovecharme del momento? Se desmayó acostado en mi cuello y como pude lo arrastré hasta la cama y lo desnudé; luego me desnudé yo y me dormí a su lado. Era tan incómodo sentir el calor de otra persona cerca. Cuando despertamos él estaba desconcertado, sabía a la perfección lo que pasaba por su cabeza, en cambio, por la mía solo navegaba de emoción al saber que estaba logrando lo que quería, pero me supe contener y actuar igual de desconcertada. No volvimos hablar del tema, pero yo ya tenía planeado algo.